Tres consejeros fueron los encargados de presentar las líneas básicas de un presupuesto para la comunidad que incrementa en un 5,4% el gasto social para este año. Hasta 258 millones destinados para mejorar las prestaciones en salud, educación, dependencia y universidad. Con esa cifra, el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, el de Presidencia, Vicente Guillén, y el de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, mostraron las líneas básicas de lo que pretende ser un proyecto de ley que se debata y negocie en las Cortes. Eso sí, para ello apelaron a la responsabilidad de las fuerzas de izquierdas y en especial a Podemos, una formación que se opone a apoyarlas si no se aceptan sus condiciones.
Los tres consejeros advirtieron de que si no se cuenta con el necesario apoyo de Podemos, el 2017 no habrá presupuestos. Con las funestas consecuencias que ello acarrearía para un proyecto político que quedaría en la práctica, completamente paralizado.
FRÍA VALORACIÓN
La aparente frialdad con la que acogió Podemos esta presentación se resumió en un comunicado distribuido por correo electrónico, a la espera de un análisis más profundo y el debate del consejo ciudadano de la formación, que se celebra mañana. «La presentación deja en evidencia la falta de proyecto del Gobierno de Aragón. Es difícil discutir sobre un presupuesto cuando lo que tenemos en enero, con los presupuestos del 2016 prorrogados, son solo un par de power point. No obstante, los órganos ejecutivos están analizando lo que ha presentado el Gobierno. Por otro lado, el Consejo Ciudadano Autonómico de Podemos Aragón se reunirá el viernes para valorar la situación», aseguraba el comunicado. Fuentes del Gobierno comunicaron posteriormente que pone a disposición de Podemos el contenido íntegro del proyecto de ley, en un nuevo intento de lograr el apoyo de esta formación. Porque, reiteraron, solo con Podemos puede haber presupuesto.
Las cuentas recuperan el nivel inversor del año 2012 y suben todas las consejerías con gasto social. El PSOE lanza un guiño a su socio, CHA, otorgando a su departamento el mayor aumento presupuestario, con un 11,1%. Una cantidad que permitirá a la consejería de Soro iniciar algún proyecto que este año fue imposible, ya que, como dijo Gimeno, la prioridad en el 2016 era sustentar lo social. En este sentido, Gimieno alabó que en tan solo un año se pudieran recuperar 400 millones para gasto social.
Educación es la segunda consejería más agraciada con una subida total del 8,3% que permitirá invertir 30 millones en infraestructuras (con centros en Pedrola, Parque Venecia, Arcosur, Valdespartera III, Villanueva de Gállego, Las Anejas o Binéfar). Asimismo, se duplica el gasto en becas de comedor y material.
Con más de un 6%, Sanidad podrá emprender varios planes estratégicos, como el de vacunas, alta tecnología o el de salud mental, y afrontar las obras tan demanadas del hospital de Teruel y el de Alcañiz. Asimismo, el aumento de 24,6 millones en el IASS permitirá ampliar las pagas de la renta básica y el Ingreso Aragonés de Inserción y aumentar en 6 millones hasta llegar a los 90 para dependencia. Asimismo, y como novedad, se incorporan 2 para combatir la pobreza energética.
La apuesta por la innovación y la investigación se recoge con un aumento de 20,3 millones de euros y un incremento de la transferencia básica para la Univesidad de Zaragoza hasta los 154 millones. Asimismo, se refuerza la política de vivienda, con un destacado aumento para personas sin recursos.
