El peso de Estados Unidos sobre la economía aragonesa es, aparentemente, pequeño. Al menos, así se desprende de las cifras de comercio exterior entre ambos territorios. Sin embargo, el rumbo político y económico que a partir de ahora emprenda Donald Trump a los mandos de la primera potencia mundial, tendrá un efecto directo sobre la actividad empresarial y productiva de la comunidad. De ahí, las dudas y la incertidumbre que genera este relevo presidencial.

No hay que perder de vista, por ejemplo, que General Motors (GM), la principal compañía presente en la región, es de capital estadounidense, al igual que otras empresas de calado. También es relevante lo que ocurra con el TTIP (el Tratado de Libre Comercio entre la UE y EEUU), que prácticamente es imposible que salga adelante con Trump y con ello se frustrarán los planes de algunas compañías locales que tenían previsto entrar o intensificar su presencia en EEUU.

El gigante norteamericano ocupó el noveno puesto como destino de las exportaciones de la comunidad en el 2015 (último año completo disponible), con unas ventas por un importe total de 234 millones de euros, lo que representó menos del 3% del total. Este valor está algo desvirtuado por el efecto Inditex, que utiliza el aeropuerto de Zaragoza como plataforma para sus envíos internacionales y supuso en torno al 40% de todo lo exportado por Aragón a este país. Los siguientes productos que más vendió la comunidad fueron equipamiento industrial, vinos, material eléctrico y productos farmacéuticos.

En cualquier caso, las relaciones comerciales entre ambos mercados están creciendo de manera formidable en los últimos tiempos. Así, en los diez primeros meses del 2016, las ventas de la comunidad a Washington crecieron un 23%, hasta los 240 millones de euros, con lo que ya se supera la cifra de todo el ejercicio anterior. Este fuerte incremento da continuidad a la tendencia positiva registrada en los años anteriores. De hecho, entre el 2011 y el 2015, las ventas de Aragón a este país se duplicaron.

Estados Unidos es además el socio comercial más importante de la comunidad fuera de la Unión Europea, pero la cuantía de las exportaciones sigue siendo pequeña en comparación con los grandes aliados de la región -Francia, Alemania y Reino Unido-, que registran valores de entre 900 y 1.600 millones al año.

El cuanto a las importaciones, su peso es también bajo. Entre enero y octubre del 2016, se situaron en 116 millones (1,3% del total), un 12% menos que en el mismo periodo del año anterior. De esta manera, la balanza comercial de la comunidad con el mercado estadounidense es claramente positiva.

MALOS AUGURIOS

Así las cosas, las empresas aragonesas vinculadas con Estados Unidos viven con expectación y un cierto temor lo que ocurra a partir de ahora allí. Tras la sorpresa mayúscula que causó la elección del polémico multimillonario como presidente de la primera potencia mundial, confían en que los malos augurios se despejen y que no se dañen las buenas y crecientes relaciones comerciales con España y Aragón.

Para la directora del Área Internacional de la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza, Nieves Ágreda, se trata de un «destino estratégico, sobre todo si tenemos en cuenta el objetivo de una mayor diversificación de mercados que busca Aragón». Además, las relaciones comerciales de la comunidad con EEUU mantiene «una tendencia alcista muy importante».

En concreto, hay un total de 733 empresas locales que exportan a Estados Unidos, 190 de ellas de manera habitual.