En el 2007 se matricularon en toda España 2.400 camiones hormigonera. Durante este año, solo se han comercializado ocho. El dato, que aporta Pedro Juan Boix, presidente de Anmopyc -- la asociación que agrupa a los más importantes fabricantes españoles de maquinaria de construcción--, deja bien a las claras el derrumbe que ha sufrido el sector en España. La caída media de la facturación respecto al inicio de la crisis se acerca al 50%, aunque en las empresas más vinculadas al mercado español el desplome aún ha sido mayor. De hecho, Juan Boix subraya que las compañías han tenido que convertirse en exportadoras "por pura necesidad".

Por todo ello, las patronales del sector urgen a la administración que impulse la obra civil para compensar la caída de la construcción industrial y residencial. "Hasta ahora la inversión pública durante la crisis ha sido totalmente insuficiente y la verdad es que no esperamos cifras interesantes hasta el 2016 o el 2017", indica Juan Boix. En este mismo sentido se manifiesta el presidente de la Confederación de Empresarios de la Construcción de Aragón (Ceac), José Luis Roca, que reclama más obra civil, aunque sabe que será "difícil porque el Gobierno tiene que cumplir con el déficit". "Hasta ahora, el 90% de su ajuste se ha realizado basándose en la caída del gasto en infraestructuras", asevera.

En los presupuestos del Estado del 2015 se han destinado a este apartado 6.141 millones de euros, un 12,6% más que en el 2014, pero 2.300 millones menos que en el 2011, cuando se registró una bajada del 40%.

LA TABLA DE SALVACIÓN Así, no es de extrañar que el peso del mercado exterior entre las 94 fabricantes integrados en Anmopyc, cuya sede está en Zaragoza, se aproxime al 70%. "En algunas firmas el porcentaje llega hasta el 90%", apunta Juan Boix, que subraya que la tabla de salvación del sector seguirá estando en el extranjero "al menos dos o tres años más".

La asociación presidida por Roca también recomienda a sus socios --unos 100 constructores y 50 promotores de toda la comunidad-- que salgan al exterior, aunque reconoce que no es nada fácil. "De momento casi ninguna trabaja fuera, es un proceso de medio-largo plazo", señala.

Juan Boix, que además de presidente de Anmopyc es director general de la empresa Serviplem, asegura en este sentido que donde hay que buscar los clientes "no es en Europa". "El mayor potencial lo vemos en Sudamérica, el norte de África, Rusia e India", comenta Juan Boix, que indica que, a pesar de la crisis, Anmopyc no ha reducido su número de socios. "Varias firmas se han dado de alta en los últimos años porque saben que salir al exterior con nuestro apoyo es más fácil", apunta.

Algo que no ha ocurrido en Ceac, que ha perdido más de 50 compañías (sobre todo promotoras) desde el 2008. Para compensar la caída, Roca insiste en impulsar la obra civil. "Hemos planteado alguna propuesta para que la DGA obtenga recursos y pueda invertir, como, por ejemplo, la venta masiva de patrimonio público", concluye.