La Unión Europea (UE) ha sufrido en poco más de un año seis atentados mortales por atropellos masivos. Estos han sido los otros ataques ocurridos en territorio europeo con este método.

Niza

El 14 de julio del 2016, un camión arrolló a la multitud en el paso de los Ingleses de Niza durante los festejos del día de la fiesta nacional francesa, causando la muerte de 85 personas. El atacante, Mohamed Lahouaiej Bouhlel, abatido por la policía, era un ciudadano tunecino con residencia en Francia que había alquilado días antes el vehículo con el cual atropelló a gran velocidad y a lo largo de casi dos kilómetros a muchos grupos de personas que se habían congregado para ver los fuegos artificiales. El autodenominado Estado Islámico (EI) asumió la autoría del atentado.

Berlín

El 19 de diciembre del 2016, un camión irrumpió en un mercado navideño y causó 12 muertos y 48 heridos, en un ataque cuya autoría asumió también el EI. El atacante, el tunecino Anis Amri, fue abatido cuatro días después por la policía italiana en Milán. Ya había estado encarcelado durante cuatro años en el país transalpino y tenía una orden de expulsión a Túnez. El camión utilizado había sido robado a un camionero polaco -que fue asesinado por Amri y se convirtió en la duodécima víctima del ataque- y gracias a un sistema de frenado automático no causó más víctimas.

Londres

El 22 de marzo del 2017, un terrorista sembró el pánico en las inmediaciones del Parlamento del Reino Unido al atropellar con un todoterreno a numerosos transeúntes en el puente de Westminster. Después de empotrar el vehículo en una verja, atacó con un cuchillo a los agentes que vigilaban el acceso a la Cámara británica. Cuatro personas murieron y una quinta falleció como consecuencia de las heridas sufridas al caer en el Támesis. El agresor, identificado como Khalid Masood -Adrian Russell Ajao antes de convertirse al islam-, era de nacionalidad británica y fue abatido por la policía cuando intentaba entrar en el Parlamento. El EI asumió la autoría del atentado.

Estocolmo

El 7 de abril del 2017, al menos tres personas murieron y ocho resultaron heridas cuando un camión atropelló a una multitud en Estocolmo, en la calle Drottninggatan, una zona peatonal y una de las arterias comerciales de la capital sueca. El primer ministro de Suecia, Stefan Löfven, señaló inicialmente que todo apuntaba a que se trataba de un «ataque terrorista». La investigación policial confirmó luego que el sospechoso detenido, Rakhmat Akilov, un ciudadano uzbeko de 39 años, estuvo en contacto por Whatsapp con otros seguidores de Estado Islámico antes y después del ataque, ejecutado por «orden» directa desde Siria, según su propia confesión.

Londres

La noche del 3 de junio del 2017, Londres volvió a vivir momentos de pánico cuando tres hombres arrollaron a una veintena de transeúntes con una furgoneta junto a la estación del Puente de Londres. Después continuaron circulando hasta el cercano mercado gastronómico de Borough Market, donde bajaron y apuñalaron a varias personas. En total murieron ocho personas y medio centenar resultaron heridas. La policía abatió a tiros a los tres terroristas, ocho minutos después de la primera llamada de auxilio. Días después se confirmaría que entre las víctimas mortales había un español, Ignacio Echeverría, de 39 años, empleado del banco HSBC en Londres, que regresaba de practicar deporte y había salido en defensa de una mujer atacada por los yihadistas.