Las familias de los fallecidos en el accidente del Yak 42 solicitaron ayer en la reunión mantenida con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que el exministro de Defensa y exembajador de España en Reino Unido, Federico Trillo, no reingrese en el Consejo de Estado. Trillo manifestó su intención de volver el mismo día que, públicamente, dijo renunciar a su plaza como embajador. El anuncio causó «estupor» entre los familiares por cuanto que suponía volver a su plaza como letrado al mismo organismo que le responsabilizaba de la mala gestión en la tragedia.

«Una persona que ha mentido y ha humillado a las víctimas no debería estar en el Consejo de Estado», insitía ayer el abogado de las víctimas, Leopoldo Gay. Y citó como ejemplo que el exministro socialista José Bono «envió a la reserva a los militares implicados».

«No es un hombre con dignidad para ocupar un cargo público», manifestó el vicepresidente de la asociación de víctimas, Francisco Cardona, quien también reveló que ni el presidente Rajoy ni la ministra Cospedal se pronunciaron al respecto, aunque sí les escucharon.

Trillo es miembro del cuerpo de letrados del Consejo de Estado desde 1979, cuando ingresó a través de una oposición, aunque está en situación de servicios especiales desde 1989, momento en el que empezó a desarrollar su carrera política. En este mismo órgano también es letrada su hija, María José Trillo, ahora en excedencia.

Para el Ejecutivo, lo más importante de la reunión ha sido el hecho de que se celebrara, por lo que supone ese gesto. De la misma forma cree que los familiares están percibiendo los cambios cualitativos en torno a este asunto y considera que eso les tranquiliza.

El Gobierno recalca que no hay condicionamientos políticos en este proceso, en el que la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, tiene previsto seguir manteniendo contactos con los familiares.