Entre los enfermos de gripe A hospitalizados en Aragón podría haber ya personas sin patologías previas y otros vacunados. Así lo aseguró ayer a este diario personal sanitario en contacto con los pacientes ingresados, aunque las autoridades sanitarias no lo confirmaron. En lo que sí coinciden todas las fuentes es en señalar que la mayoría de los ingresados pertenece a grupos incluidos entre los factores de riesgo, sufren alguna patología grave o crónica y no se inyectaron el antídoto. "La mayor parte sufrían problemas crónicos previos, por lo tanto estaban incluidos en los grupos de riesgo para recibir la vacuna antigripal, aunque la mayor parte de los que están hospitalizados no la había recibido. Desconozco si todos o no", se limitó a decir ayer Salvador Bello, jefe del servicio de Neumología del Hospital Miguel Servet.

Esas personas sanas a las que habría alcanzado el virus serían personas de mediana edad (algo más de 40 años) y en algún caso estarían en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). De hecho, el perfil actual de paciente con gripe A oscila entre los 30 y los 50 años, un patrón mucho más joven que el habitual.

De momento, los datos oficiales del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, a través de la sección de Vigilancia Epidemiológica del Servicio de Drogodependencia y Vigilancia en Salud Pública de la dirección general de Salud Pública, advierten de un total de 44 casos hospitalizados por gripe A (H1N1), de los que 19 están en cuidados intensivos.

DISTRIBUCIÓN Casi la mitad del total (21) están ingresados en el hospital Miguel Servet de Zaragoza (9 en la UCI), los cuidados intensivos del Clínico acogen a otros seis, los mismos que el Royo Villanova (2 en la UCI), mientras que el Obispo Polanco de Teruel mantiene hospitalizadas a ocho personas (3 en UCI), y la clínica Quirón, el hospital de Alcañiz y el Ernest Lluch de Calatayud han detectado un caso cada uno. Solo el ingresado en el centro privado de la capital aragonesa está en vigilancia intensiva.

La gripe A sigue saturando los servicios de Urgencias de los hospitales. De ahí que la gerencia del Miguel Servet haya ordenado la apertura de la sala de observación número 3 (la más cercana a Trauma), respondiendo, así, a la demanda de los profesionales, que habían reclamado constantemente la habilitación del recinto para paliar la saturación en Urgencias. La orden se había dado ya el pasado viernes, ante el continuo incremento de casos de gripe A, pero, aunque la apertura estaba prevista para la tarde de ayer, no se hizo efectivo hasta la madrugada.

La intención del Servet es destinar a esta sala los posibles afectados por gripe A, que, actualmente, están dispersos en varias plantas. Varios de ellos ocupan una cama en la mitad de la planta tercera de Trauma abierta el pasado domingo. En todo caso, desde el Salud se asegura que en todos los casos se han tomado las "restricciones necesarias" para asegurar el aislamiento y evitar el riesgo de contagio. "Algunos están juntos, pero siempre separados del resto", indicaron desde el Miguel Servet.

Desde la Administración admiten su "preocupación" por las consecuencias del denominado "efecto llamada" por el que las Urgencias se saturen por el "miedo" a la gripe A de personas "sin síntomas y que, en otras ocasiones, se quedarían en casa, pero ahora se asustan", apuntaron.