José Ignacio Espot, alcalde de Laspaúles vivió ayer sus peores horas al frente del consistorio de esta localidad oscense. "Está todo muy mal. La situación es terrible. Está todo el monte ardiendo y los vecinos de los pueblos, por mucho que trabajemos en la extinción no podemos hacer nada. Sientes una impotencia total", dijo. A última hora del día ni él mismo se explicaba lo sucedido. "El viento lo está complicando todo. Durante toda la tarde los aviones no han podido trabajar y eso se ha notado. El viento además avivaba continuamente las llamas que venían por todos lados", explicó. A pesar de los momentos de tensión Espot subrayó que las labores de evacuación de los vecinos --en torno a 90 en total-- se habían desarrollado con "normalidad", dentro de las "difíciles circunstancias". "La gente de los pueblos se está volcando en acoger a todos aquellos que han tenido que dejar sus casas".