Bajo el lema La educación no se vende, se defiende, cerca de 2.000 estudiantes se manifestaron ayer en Zaragoza para mostrar su rechazo a las medidas decretadas por el Ministerio de Educación que, entre otras cosas, supondrán un incremento en las tasas y una severa penalización para repetidores. La manifestación, que se desarrolló sin incidentes, la encabezó una pancarta en la que se podía leer Contra los recortes y la privatización, ¡Organízate y lucha! y partió del campus San Francisco para finalizar en la avenida Gómez Laguna, frente a la consejería de Educación. Posteriormente, aproximadamente medio centenar de alumnos decidieron continuar con su protesta encerrándose en el edificio Interfacultades del campus zaragozano.

El acto, generado a nivel estatal, fue convocado en Zaragoza por el Colectivo de Estudiantes Progresistas de Aragón (CEPA) y apoyado por el Consejo de Estudiantes. Su presidenta, Claudia Lorente, fue la encargada de leer el manifiesto en Gómez Laguna. Aseguró que los recortes que se están acometiendo son una "salvajada" y suponen "un retroceso a niveles que no habíamos visto desde hace años".

TASAS Y BECAS

El encarecimiento de las segundas matrículas supone para Lorente plantear una hipótesis en la que todos "tienen todo el tiempo del mundo para estudiar", sin embargo, como afirmó, "muchos tenemos que trabajar y encima se han reducido en un 12% las becas".

Encabezando la protesta se pudo ver a las cabezas visibles de los principales sindicatos de estudiantes, entre ellos, Guillermo Ucar, coordinador general de CEPA, que apuntó que la subida de tasas "limita el acceso libre de todas las personas a la educación" y destacó que en Aragón se está haciendo "competir a la universidad pública con la privada".

Otro de los sindicatos presentes fue EDU, su vicecoordinador, José Antonio Gadea, calificó las medidas como "un ataque frontal a los derechos de los estudiantes y de las personas con menos recursos". Además, señaló que no se trata de un ajuste económico, si no "ideológico", por parte de "una derecha que quiere convertir la universidad en un gueto elitista". Opinión parecida fue la de Marta Bernad, representante del Colectivo Chen, que aseveró que la subida de tasas es una "injusticia que no va a arreglar el problema financiero e indicó que "todo va encaminado hacia la privatización de la universidad pública".

Las enseñanzas medias también estaban convocados a esta manifestación. El coordinador de la Asociación de Estudiantes de Aragón (ADEA), Rubén Sanz, afirmó que los estudiantes de Secundaria también deben defender los derechos de "los alumnos y de los trabajadores, porque todos se van a ver afectados".

Después de la manifestación, casi medio centenar de universitarios decidieron iniciar un encierro, en el edificio Interfacultades del campus zaragozano, que se prolongará hasta mañana. "Tenemos que reflexionar y analizar hacia dónde nos quieren llevar con todas estas medidas", apuntó Francisco López, uno de los alumnos que tomaron la medida, destinada a "visualizar la lucha que muchos estudiantes y otros colectivos educativos están llevando en contra de las medidas adoptadas por la política privatizadora del Gobierno".

Además, la protesta también se escuchó en centros públicos, como el instituto Elaios, que, en un acto en favor de la escuela pública y contra los recortes, los profesores y alumnos del centro, situado en el barrio del Actur, de Zaragoza, se concentraron a las puertas del instituto.

La decisión, aprobada en asamblea, se adoptó con el objetivo de "mostrar nuestra rechazo a las nuevos recortes anunciados por el ministerio de Educación, que suponen un ataque sin precedentes a la educación pública", esgrimieron desde el centro, que abogaron por "seguir dando la pelea, en defensa de una educación pública de calidad", subrayó Jorge Calderón, uno de los profesores del centro.

Aunque la indignación estudiantil no solo quedó patente en Zaragoza. La Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública inició ayer en Teruel una campaña de movilizaciones para denunciar los recortes en la pública y los recursos destinados a la privada. Estas movilizaciones se desarrollarán todos los miércoles a las 11.10 horas en todos los centros educativos mediante concentración de cinco minutos hasta el 20 de junio, cuando finaliza el período lectivo.

Para marcar el inicio de esta ronda de movilizaciones ayer se concentraron ante el instituto Vega del Turia (antiguo Ibáñez Martín) profesores, sindicalistas y representantes de diferentes organizaciones así como de padres de alumnos.

El pasado martes, los sindicatos de enseñanza ya se concentraron en la capital aragonesa contra los recortes.