El presidente de Aragón, Javier Lambán, se mostró ayer tajante y convencido respecto al futuro de la enseñanza que quiere en la comunidad y aseguró que su Gobierno aspira a que la concertada «no sea necesaria». Durante su comparecencia en el pleno de las Cortes a petición del PP, Lambán habló de un Aragón en el que «la totalidad de la población esté escolarizada en la escuela pública y exista una privada, a la que respetamos absolutamente, pero que no sea necesario recurrir a ninguna clase de conciertos», remarcó.

Lambán reiteró que la DGA ya prepara los recursos contra las decisiones judiciales que le obligan, de forma cautelar, a mantener abiertas 13 aulas en la escuela concertada. «Se agotará la vía judicial hasta las últimas consecuencias», dijo.

En uno de los momentos más tensos del pleno, le recordó a la portavoz del PP, Mar Vaquero, que la decisión de dejar de concertar esas aulas persigue reequilibrar lo que desequilibró el PP. «Rudi cerró aulas públicas a mansalva y sin ningún tipo de criterio e hizo lo mismo en la concertada; Rudi acabó con los presupuestos de la escuela pública y con 1.000 profesores ¿Eso es unir enseñanzas señora Vaquero?», le preguntó el presidente.

Los populares, por su parte, insistieron en la «confrontación social» a la que ha llevado la DGA la educación en la comunicad. «Ustedes se han encargado de enfrentar dos sectores que convivían pacíficamente y complementados hasta que ha llegado usted. Es el único responsable de esa fractura y de convertir la materia educativa en un infierno», dijo Vaquero.

DEROGAR La LOMCE / La portavoz también le espetó al presidente que tiene «miedo» a la libertad y aseguró que en la comunidad «la libertad tiene un problema que se llama Lambán», señaló Vaquero, quien apuntó que no se puede garantizar la igualdad suprimiendo una de las dos opciones que tienen las familias para elegir la educación de sus hijos.

El presidente, en su réplica, consideró que para que el PP esté plenamente legitimado para hablar de libertad «le faltan tres o cuatro generaciones», dijo.

Además, señaló que el origen del problema es la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y la interpretación que de ella hacen los jueces en Aragón, «diferente» a la que hacen magistrados de otras comunidades. Así, anunció que se presentará en las Cortes una proposición de ley para trasladar el debate al Congreso e intentar derogar la norma, en particular los artículos que permiten implantar un sistema educativo segregador.

las reacciones / En la intervención de los grupos, Erika Sanz, de Podemos, criticó que el PP entienda la enseñanza como un «negocio» bajo el falso paradigma de la libertad de elección de centro y lamentó que la justicia no sea igual para la escuela pública que para la concertada, ya que familias de la comarca de las Cuencas Mineras, en Teruel, recurrieron el cierre de aulas y no se tomó ninguna medida. Este hecho fue recordado ayer por CCOO en la capital turolense. «En la bancada del PP podemos ver representado al lobby de la privada concertada», dijo Sanz.

Arturo Aliaga, del PAR, señaló que «la política es el arte de llegar a acuerdos» y apeló a reactivar la búsqueda de un pacto por la educación, «en el que la escuela concertada debe seguir haciendo un papel para que la sociedad sea mas plural y poderosa».

Desde Ciudadanos, Susana Gaspar, tildó de «lamentable» el espectáculo vivido en las Cortes con un debate en el que se debería buscar el consenso y que parte de un «mal acuerdo» del PSOE con Podemos. «Lambán es responsable por no querer llegar a pactos con otros grupos para sacar adelante los presupuestos por su prepotencia y chulería», dijo.

Por el grupo mixto, Gregorio Briz, de CHA, acusó al PP de defender el «elitismo y el segregacionismo» y apuntó que también se puede ser crítico con las decisiones de la justicia, porque a veces son «interesadas». Así, recriminó a los populares que judicialicen lo que no ganan en las urnas buscando atajos en nombre de una libertad.