Las largas colas de ahorradores catalanes volvieron a aparecer ayer en las entidades financieras de la zona oriental de Aragón (también conocida como La Franja). La incertidumbre sobre la situación política en Cataluña ha provocado que muchos ahorradores de esa comunidad opten por trasladar sus depósitos.

Se trata del epílogo del viernes pasado, día en el que ya se registraron largas colas en oficinas de Fraga y de otras poblaciones de la zona. No obstante, fuentes financieras reconocieron ayer que esta situación también se ha trasladado en menor medida a otros municipios de Aragón y también a la capital, Zaragoza.

Dichas fuentes señalaron que estos impositores abren cuentas con importantes cantidades económicas y que optan por sacar sus ahorros de Cataluña «por si acaso», a pesar de las garantías ofrecidas por sus respectivas entidades de origen. Una buena parte de los ingresos, añadieron, oscila entre los 30.000 y 50.000 euros, aunque se han llegado a registrar entradas de hasta un millón de euros, estas últimas de empresarios con una mayor capacidad financiera.

Además de las imposiciones realizadas tras esperas en largas colas, estas entidades registran importantes movimientos de fondos a través de internet o, incluso, por medio de llamadas telefónicas.