El fiscal José Grinda y los alrededor de 40 agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) regresaron ayer a Madrid, según confirmaron fuentes policiales, con los miles de documentos incautados en la decena de registros practicados en Zaragoza. Entre ellos, los de la sede de la Unión Temporal de Empresas formada por Acciona y Mariano López Navarro, en Arcosur, la sede de Acciona en Plaza y las viviendas particulares de los arrestados. Según la Fiscalía, no descartan que del análisis de estos documentos pudieran desprenderse indicios de nuevas actuaciones delictivas.
Mientras, la instrucción judicial será conducida por un juzgado zaragozano, en principio según el orden aleatorio que corresponda por el reparto del Juzgado Decano. Las primeras diligencias remitidas el miércoles por el Juzgado de Guardia ya habrían sido enviadas a uno de ellos, pero deberán ser unidas a las del jueves, una vez se inhiba el juzgado de instrucción al que le correspondieran.
