Ni Carolina Herrera ni Armani ni Diane Von Furstenberg. Melania Trump se decantó por Ralph Laurent, un clásico americano (y uno de los favoritos de Hillary Clinton), que este año, además celebra su 50º aniversario. El modelo en cuestión, en color babyblue, era un vestido con capa que guarda ciertas reminiscencias con el glamur de Jackie Kenedy. Y es que Melania hizo un guiño a la elegancia de siluetas geométricas y la estética cocoon que lucía una elegante e irrepetible Jackie, quien también eligió esa tonalidad en 1961 para la posesión del entonces presidente John F. Kennedy.

La 45ª primera dama, que sin ninguna duda se inspiró en el elogiado estilo de Jackie Kenedy, tuvo en cuenta los cánones de la moda que imperaban en la década de los años 60, eligiendo un monolook con guantes y tacones salón, del mismo matiz dulce y apastelado. El resto del estilismo siguió la misma línea minimalista: el cabello recogido con un clásico moño, sin rastro de accesorios y unos discretos pendientes de diamantes. Una estética con la que Melania se aseguró las críticas de un vestuario que recordó poderosamente al estilo irrepetible de la idolatrada exprimera dama.

Estilo más entallado

Según algunos especialistas en moda, la esposa deTrump, de 46 años, actualizó el estilo lady, tendencia que puso de moda la esposa de Kennedy en el siglo XX, con «un talle más ajustado y adaptado a la silueta de la exmodelo eslovena». Curiosamente, durante el acto, las dos familias presidenciales invirtieron los papeles: Michelle Obama lució un diseño en burdeos que contrastó con el tono Tiffany de Melania. Por el contrario, Donald Trump lució su ya habitual corbata roja frente a la opción azul de Obama.

Dos gotas de agua

Ivanka y Tiffany Trump, las dos hijas del nuevo presidente de EEUU, aparecieron en el Capitolio vestidas y peinadas exactamente igual. Como si se tratara de dos gotas de agua, las jóvenes resaltaron su estática y rubísima melena monocolor con un vestuario blanco nuclear. Ivanka, la hermana mayor, empresaria, madre de tres hijos y la hija favorita, como la denominan algunos, se alejó de las pautas convencionales del fashion y ha arriesgado un poco más que su hermana pequeña. Para la ocasión eligió un vanguardista traje pantalón diseñado por Oscar de la Renta con cola en la parte posterior de la chaqueta y unos rompedores guantes de cuero negro.

Por su parte, Tiffany vistió de corte clásico e inmaculado, con abrigo de botonadura, falda a media pierna y un collar de perlas.