La Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT Aragón anunció ayer movilizaciones en el sector ante la "paralización absoluta" de la situación del convenio de atención a personas dependientes, y que aumentarán en septiembre si la patronal no negocia el VII convenio. En Aragón 9.000 trabajadores se rigen "estrictamente" por el convenio marco firmado a nivel estatal, ya que la comunidad no cuenta con una negociación propia desde 2007. La secretaria general de la FSP, Alicia Hernández, informó de que las pretensiones de la patronal son disminuir las condiciones laborales y producir bajadas salariales del 12 %, lo que supondría volver a los salarios de 2007. Además, Angélica Mazo, secretaria de Servicios Sociales de la FSP de UGT Aragón, criticó que las ayudas a domicilio han registrado un "acusado descenso" en la capital aragonesa en los últimos años, donde además ha habido un retraso en la concesión de altas.