José Manuel Ágreda se sube por la paredes cada vez que lee o escucha en los medios que el euríbor vuelve a batir un nuevo mínimo histórico. Algo que, por cierto, ocurre últimamente casi cada mes. El índice de referencia de la mayoría de hipotecas en España lleva tiempo concediendo una tregua a los bolsillos de miles de ciudadanos, pero este zaragozano de 40 años no ha visto abaratar su cuota mensual ni de lejos. Más bien el contrario. El tipo de interés de su vivienda de protección oficial (VPO) de Valdespartera es fijo y lo revisa cada año el Ministerio de Fomento. En el 2012 y el 2014 lo modificó al alza, por lo que su hipoteca se ha encarecido en plena crisis.

"Solo sé que ahora estoy pagando 120 euros más que en el 2011", se queja Ágreda. Eso sí, la subida no responde solo al incremento de los tipos fijos; se debe también al fin de la ayuda de subsidiación. "Recibía 50 euros, pero ya no pude prorrogarla porque no cumplía los requisitos", indica el zaragozano, que critica la supresión por parte del Gobierno. "Yo he tenido suerte y he mejorado mis ingresos, pero hay mucha gente que lo está pasando mal y que compró este tipo de vivienda porque era más asequible", señala.

Con todo, su queja se centra sobre todo en la subida de los tipos de interés. No entiende que el ministerio los elevara en un momento en el que el euríbor ya cotizaba a la baja. "No tiene ningún sentido, es un abuso en toda regla", lamenta Ágreda, que es profesor de instituto. Por eso, ahora espera expectante la decisión que Fomento deberá tomar durante este primer trimestre: "Si los vuelve a subir ya será una auténtica tomadura de pelo".

El aumento de los tipos afecta a todos los propietarios de VPO salvo a los del plan 2009-2012, cuyos préstamos ya están referenciados al euríbor.

En la misma situación que Ágreda se encuentra Fran, que el pasado mayo tuvo que revisar la hipoteca de su piso de Rosales del Canal. Su interés ha pasado del 2,72% al 2,93% y su cuota ha subido en torno a 10 euros.