La agrupación de comunidades para efectuar una Inspección Técnica de Edificios (ITE) puede suponer un ahorro de hasta el 50% para los vecinos. La liberalización de honorarios impuesta por ley provoca que cada particular (arquitecto, aparejador o ingeniero) encargado de llevar a cabo el examen pueda realizar su propio presupuesto sin la obligación de presentarlo a su colegio correspondiente. Esa situación y la actual necesidad de imponer unos precios competitivos lleva a los profesionales a efectuar un importante descuento en función del número de comunidades a las que efectuar la inspección.

Así, la ITE de un edificio común de 50 años --mínimo impuesto para hacer obligatoria la inspección--, con alrededor de 10 vecinos --5 plantas-- y una superficie de 1.200 metros cuadrados puede alcanzar un coste aproximado entre los 300 y los 350 euros, aunque se realizan importantes descuentos en función de la ubicación y el volumen. Así, un mayor número de pisos y, por consiguiente, de viviendas conlleva un incremento de la tarifa, que pasaría a ser de 500 ó 550 euros para un inmueble de 25 viviendas y 10 plantas en Fernando el Católico.

ELEVADOS DESCUENTOS Pero la agrupación de vecinos, una medida que ya se ha convertido en habitual en numerosos barrios de la ciudad, supone que el precio establecido puede reducirse a la mitad. "Nosotros llegamos a descontar hasta casi el 50% en el barrio Oliver, donde se agruparon 27 comunidades, lo que les permitió un precio de 185 euros por cada una de ellas", apuntó Javier Beltrán, de la empresa JBF.

El descuento es menor conforme se reduce el volumen de la agrupación. Así, la reunión de dos o tres comunidades puede suponer un descuento del 5% mientras que una agrupación de media docena podría conducir a una rebaja del precio que alcanza el 15%.

El tipo de barrio también aboca a honorarios diferentes debido a la tipología de las construcciones. "En Torrero, por ejemplo, son viviendas unifamiliares y hacer la inspección de 200 de ellas puede suponer un gasto entre 120 y 150 euros cada una", subrayaron desde Zaragoza.ite, otra de las empresas especializadas en este tipo de trabajos. Además, cada vez es más habitual que las comunidades acuerden con el profesional correspondiente un pago en varios plazos.

En la mayor parte de compañías, la tarifa queda condicionada a las horas de trabajo invertidas. "No es lo mismo hacer una inspección para un edificio de Valdefierro o La Paz, que puede suponer un cuarto de hora, a hacerlo en un gran inmueble de oficinas, cuya duración puede alcanzar los dos días", apuntaron desde el Colegio de Arquitectos. En este último caso, los honorarios se elevarían hasta alcanzar una horquilla entre los 3.000 y los 6.000 euros.