--¿Está satisfecho con el balance de incendios de este año?

--Si se compara con otros años, el 2011 está siendo positivo. Y también este verano, en el que apenas ha habido siniestros. Hay un dato que es significativo: de los 346 incendios que se han producido este año, 266 han sido de menos de una hectárea, lo que conocemos con el término de conatos. Esto demuestra que funciona con eficacia el servicio antiincendios de Aragón, ya que actúa vigilante y con mucha celeridad, lo que evita que las llamas se propaguen.

--Además de la rápida actuación de las brigadas, ¿qué otros factores influyen?

--La rapidez en la actuación es fundamental. Pero no conviene bajar la guardia. Además, en los próximos días vamos a estar en máxima alerta por el aumento de las temperaturas. Un factor que ha influido positivamente es que el mes de julio ha sido menos cálido que la media, y también ha sido húmedo, lo que ha contrarrestado la ausencia de precipitaciones. Si pasamos lo que queda de agosto como hasta ahora, y no hay tormentas secas, habremos pasado lo peor. Estamos bien desde el punto de vista cuantitativo, pero aún mejor desde el cualitativo. Con todas las precauciones, estamos satisfechos.

--¿Se cambia la estrategia al estar en máxima alerta?

--Sí se cambia la planificación de las labores de nuestro operativo. Se está aún más atento y se intensifican las labores de vigilancia, para que se dé aviso con la máxima inmediatez y se planifican las guardias oportunas. El trabajo de las cuadrillas en estos momentos se hace más en los puestos de vigilancia que en el monte.

--¿Son suficientes los medios materiales y humanos?

--La dotación en estos momentos es de70 retenes de los que 62 son terrestres y ocho bases helitransportadas. El operativo es importante. Tenemos que tratar de dotarle de la mayor eficacia y trabajar con los medios que tenemos optimizando los recursos.

--¿Significa que puede haber recortes también en este apartado de la Administración pública?

--Es pronto para saberlo. Lo veremos el día en que nos fijen las condiciones presupuestarias y se conozca el techo de gasto.

--¿Cuánto se está invirtiendo?

--Tenemos varios programas encomendados a la empresa pública Sodemasa por partidas que rondan los 11 millones de euros entre retenes, operativos, cuadrillas, material... Además, se invierten 4,5 millones en servicios aéreos y con la suma de otras partidas, la inversión global ronda los 20 millones de euros anuales.

--¿La fusión de las áreas de Agricultura y Medio Ambiente, son una ventaja o un inconveniente para la prevención de incendios? Usted ya estuvo en el anterior Ejecutivo autonómico, precisamente en un Departamento que solo se dedicaba al Medio Ambiente. ¿Cómo ve esa fusión?

--Si se ha fusionado, se entiende que así se va a mejorar la gestión y yo estoy convencido de que con comunicación y planificación, así será. Yo puedo decir que en mi área estamos encantados de trabajar mano a mano y coordinados con Agricultura.

--Además del Gobierno de Aragón, ¿qué papel juegan las comarcas y los consistorios?

--Muy importante. Siempre están dispuestos a colaborar y su predisposición con el director del operativo es absoluta. Su ayuda es también imprescindible.

--¿Hay más sensibilización?

--Estamos satisfechos. La sociedad está cada vez más sensibilizada porque las negligencias cada vez son menores. También influyen las campañas de voluntariado medioambiental

--Acaban de alcanzar un acuerdo con la plantilla de Sodemasa que ha evitado la huelga. ¿Cómo lo valora?

--Positivo para todos. Hay un compromiso conjunto para planificar los próximos cuatro años y cumplir con la Ley de Montes.

--¿Se profesionalizará la plantilla?

--Iremos viendo y ajustando las necesidades a las demandas.