El PP aragonés dejó constancia del calado que tiene en la comunidad. Una muestra de fuerza, de músculo: reunió a casi 2.500 personas en el denominado día del afiliado, que se celebró en Épila. Allí irrumpió la presidenta del Gobierno, Luisa Fernanda Rudi, rodeada de los suyos para hacer balance en el ecuador de una legislatura resquebrajada por la crisis y la corrupción. Esos fueron los ejes de su discurso. Defendió los recortes y las reformas en los servicios públicos, y sacó la cara por los políticos "cumplidores", a los que contrapuso a los "garbanzos negros y manzanas podridas". A esos, "patada y fuera".

La presidenta de la comunidad negó que su partido esté desmantelando la sanidad y la educación. Los que dicen eso "mienten y engañan", dijo refiriéndose a los partidos de la oposición y los miles de ciudadanos que protestan en la calle. Al contrario, defendió los recortes que está aplicando el PP como la única vía para garantizar la pervivencia del estado del bienestar. "Hay que marcar las prioridades y las nuestras pasan por el gasto social, que supone el 62% del presupuesto y se logra mantener la calidad".

VALOR POLÍTICO Como ya ha hecho otras veces, Rudi reivindicó el valor de los políticos y las instituciones, en un momento en el que reciben toda suerte de críticas. Mostró su preocupación por la desafección de la ciudadanía, que está alimentada, en su opinión, por algunos sectores de la izquierda. "Debemos ser fieles garantes de las instituciones porque son los pilares de las libertades y de la democracia", subrayó. Pero además fue más dura que en otras ocasiones con la corrupción. "La mayoría cumplimos con nuestras obligaciones, somos gente normal. Pero cuando aparece un garbanzo negro, una manzana podrida, patada y fuera", zanjó.

En pleno debate sobre las pensiones, la lideresa popular apostó por sacar este asunto del debate político porque son "un derecho" y están garantizadas "de por vida" para todos. Pese a ello hizo una llamada a la reflexión para "analizar el sistema". Subrayó que es "urgente" encontrar "el método y el sistema para que quien ahora tienen 30 o 40 años pueda llegar a cobrar su pensión y eso es lo que está haciendo el Gobierno de Mariano Rajoy". Y recordó que cuando el PP gobernó con José María Aznar como presidente "se creó el Fondo de Garantía de Pensiones, al que hay que estar acudiendo ahora por lo que no hicieron los siguientes gobiernos socialistas".

Al contrario de lo que suele ser habitual en ella, atacó con dureza a las tergiversaciones históricas que se perpetran desde Cataluña. Exigió a la Generalitat "que deje de manipular la Historia", y recordó que "jamás existió la Corona Catalanoaragonesa". La aseveración levantó al público que llenaba la explana del Santuario de Nuestra Señora de Rodanas (Épila). "Muchos aragoneses que viven en Cataluña han trabajado para sea lo que es hoy", sentenció. Pese a ello, expresó su intención de colaborar con la Generalitat en asuntos como los bienes religiosos de la Franja porque "juntos funcionamos mejor". Frente a las tensiones independentistas la presidenta manifestó que en su partido quieren "seguir bajo el amparo de la Constitución porque se ha demostrado que ha sido el mejor instrumento jurídico-político que nos ha permitido dar el gran salto y olocarnos al nivel, codo con codo, del resto de países".

Un modelo "que ha permitido avanzar a todos los territorios de España" y hacer un país "plural y diverso, donde la soberanía popular reside en el conjunto de los españoles, no en cada región o comunidad autónoma".

Rudi recordó que desde Aragón, "que fue reino cofundador de España allá por el siglo XVI, algo tendremos que decir en el debate que algunos han abierto", para apoyar una Carta Magna que "nos ha dado la mejor y más larga época de avances sociales, de creación de riqueza, de libertad y democracia". Y lamentó que haya "unos pocos" que "intentan que se rompa" ese pacto, "manipulando la información que hacen llegar a los ciudadanos", al tiempo que ha criticado que cuando "algunos sectores ponen en duda la unidad".