El actual presidente de la comunidad, el popular Pedro Sanz, que ha gobernado cinco legislaturas en solitario en una de las autonomías más estables electoralmente, perdió ayer la mayoría absoluta y necesitará el apoyo de Ciudadanos para seguir en el cargo. El PSOE logra frenar la sangría de votos del 2011 y en esta ocasión solo se deja un escaño en el camino.

En el Parlamento autonómico entra Podemos, como tercera fuerza más votada.