"Trabajamos con mucho esfuerzo para ofrecer la máxima calidad y ganarnos la confianza de la gente pero lo ocurrido nos acaba metiendo a todos en el mismo saco". Las palabras de Pilar Acedo, responsable de la residencia Las Mimosas y vocal de la asociación Arade que integra a residencias de la tercera edad en Aragón, resume a la perfección el sentir de un sector que se encuentra desde el pasado sábado "en estado de shock" por las circunstancias que han concurrido en el caso de la residencia Santa Fe, donde perdieron la vida ocho personas en un incendio. Lo ven como un incidente "puntual" pero que puede dar al traste con el trabajo de muchos años de otras que "hacemos las cosas de otra manera". Pero sobre todo porque ven "incomprensible" que hayan fallado durante 17 años todos los mecanismos de control administrativo para estar funcionando sin licencias.

Para el sector de la dependencia son días de luto. "Lo ocurrido nos incide directamente pero nosotros nos constituimos como asociación en el 2012 para crear una marca de calidad y, entre otras cosas, para formar parte de ella exigimos estar inscritos en el Registro de Entidades, Servicios y Establecimientos de Acción Social de la DGA para demostrar que cumplimos con la legislación", explicaba a este diario Paquita Morata, gerente de Arade (Asociación Aragonesa para la Dependencia). En ella hay asociados 52 centros en la actualidad, entre ellos el de Alfamén donde los supervivientes de la tragedia recuperan hoy la normalidad en sus vidas. Este, de propiedad pública y gestión privada, se ofreció voluntariamente a acogerlos porque disponía de las plazas suficientes.

EXIGENCIAS ALTAS

Las circunstancias en las que la residencia Santa Fe funcionaba sin licencia son extrañas para la gerente de Arade. "Se me hace rarísimo todo. Para abrir las puertas primero hay que tener la licencia de apertura municipal. De hecho, a los nuevos ahora les cuesta mucho conseguirla porque las exigencias son muy altas", exponía, al tiempo que destacaba que "las inspecciones son muy exhaustivas para las que estamos funcionando dentro de la legalidad, lo cual nos parece bien, y muy pocas para aquellas que todos sabemos que no reúnen las condiciones". Se refería, por ejemplo, a que "una persona puede meter en un piso a cuatro abuelos y tenerlos sin licencia de residencia pero sí como pensión".

También niegan que el problema de Santa Fe sea de personal, por tener a una cuidadora para 19 residentes por la noche. "Las residencias no son hospitales, la principal actividad se desarrolla por el día y por la noche están durmiendo. El problema real está en las instalaciones, en disponer de un plan de evacuación, de cierres electrónicos de puertas, de sistemas que permiten aislar a las habitaciones de un fuego durante un mínimo de 30 minutos (RF de las puertas) o en la división por sectores y elementos cortafuegos que nos piden a todos para abrir". "La trabajadora estará viviendo un momento terrible, no lo va a olvidar en la vida. Hay que ser muy respetuosos con ella", añadió.

PROBLEMAS MENTALES

Por último, otra de las incógnitas que sobrevuela sobre el ciudadano es si es tan fácil que un residente con problemas de salud mental pueda originar sucesos como el que se le atribuye, prender fuego a un colchón. En los últimos años, con el aumento de la esperanza de vida es más habitual que haya personas con este tipo de enfermedades. En muchos es alzhéimer pero también pueden tener otras, como el comportamiento bipolar o conductas esquizofrénicas.

Pero en todos ellos "con el tratamiento médico y el seguimiento adecuado no deberían dar ningún tipo de problema", y esto siempre se detecta en el Plan Individualizado de Atención (PIA) que se les debería hacer. La duda es si un centro como este, sin licencias y sin las condiciones requeridas por la DGA, realizaba este examen previo. O, si no lo hizo, la familia no consideró adecuado comunicar que la anciana que causó el fuego protagonizó un episodio de violencia como el que estuvo a punto de costarle la vida a su esposo en el 2013 y a ella le valió la incapacitación jurídica.