El Partido Socialista, siguiendo la ola de crecimiento de toda la comunidad, ha aumentado su representación en el ayuntamiento turolense en dos concejales, donde ha logrado ocho, con lo que consigue igualar con el Partido Popular y optar a la alcaldía en las mismas condiciones que su principal rival y hasta ahora partido gobernante. Aún así, el PP sigue siendo la fuerza más votada en la ciudad, pese a que ha perdido uno de sus ediles. El Partido Aragonés mantiene sus cuatro representantes, por lo que tendrá, una vez más, la llave de la gobernabilidad.

En la pasada legislatura los nacionalistas respaldaron con apoyos puntuales la gestión de los populares, llegando incluso a un acuerdo de legislatura en el que se repartieron distintas áreas de gobierno. Sin embargo, la relación acabó siendo convulsa y tras el cese del concejal nacionalista José Montón por parte del alcalde Manuel Blasco, la empatía se rompió y el PP acabó gobernando en minoría. La igualdad de resultados que se ha producido en los actuales comicios entre los dos partidos mayoritarios en Teruel deja en el aire la inclinación que tomará finalmente el PAR y que, con toda probabilidad, estará marcada por los pactos generales en el parlamento autónomo.

No hay que olvidar tampoco la correlación de fuerzas surgidas en la composición de la Diputación Popular de Teruel, donde el PSOE domina con 10 diputados, el PP queda con 9; PAR tiene 5 y uno, la gran sorpresa, IU. En estas circunstancias, los nacionalistas podrían fácilmente llegar a acuerdos por el PSOE para apoyar a éstos en la alcaldía de Teruel y, en compensación, mantener la presidencia de la diputación, que han ostentado también en la pasada legislatura en la persona de Miguel Ferrer. Si estos acuerdos llegasen a fructificar, la candidata del PSOE, Lucía Gómez, sería la primera mujer que llegue la alcaldía de la ciudad. De todas las formas, habrá que esperar, pues como decía ayer el propio Ferrer "es demasiado pronto para aventurar a quien vamos a apoyar, pues hay que meditar bien los resultados en los próximos días" .

Por su parte, Chunta Aragonesista conserva su concejal en la capital turolense, una concejalía que nunca pasa de ahí pero que lleva camino de ser histórica, pues tampoco nunca se pierde. Mientras, Izquierda Unida es la más perjudicada puesto que el 4,09% de los votos no le permite mantener el concejal que tenía hasta ahora.

PORCENTAJES En cuanto a los votos emitidos y los porcentajes conseguidos por las distintas fuerzas políticas en la capital de la provincia, es curioso destacar que el ligero aumento de apoyos obtenido por el PP --426 votos más que en las anteriores elecciones-- no ha servido, sin embargo, para aumentar su porcentaje, que desciende de un 39,25% al 36,55%. El aumento realmente espectacular se ha producido en el PSOE, que ha pasado de 3.886 votos a 5.695, creciendo siete puntos y logrando un 33,36% de los sufragios, por lo que, como recordaba la candidata a la alcaldía, "somos el único partido que ha tenido un aumento en el porcentaje de votos" . También es significativo que este incremento le ha llevado a obtener los mismos concejales que el Partido Popular, a pesar de que el voto real se sitúa en medio millar menos de sufragios que los obtenidos por los populares.

A destacar también la reducción del porcentaje de la abstención, que baja del 39,6% de las elecciones de 1999 a un 33,01% en los actuales comicios.