El presidente de Stop Accidentes en Aragón, Miguel Ángel Bernal, calificó la idea del aumento de velocidad de "barbaridad". "De lo que se trata es de que sea una vía urbana que descongestione la ciudad, pero manteniéndose segura. A 50 kilómetros por hora ya ha habido muertos por atropello, pero hemos conseguido reducir la siniestralidad vial a la mitad en una década. Si volvemos a subir, se incrementarían exponencialmente los riesgos de accidente", expuso. "Vamos a dejarnos de asumir riesgos innecesarios", subrayó. Tampoco se mostró de acuerdo en que la vía esté infrautilizada, como opinó Suárez al apuntar que con mayor velocidad atraería a más conductores. "Es una vía muy transitada, no solo por coches sino por ciclistas y peatones", aseguró.

Lo que sí apoyó el presidente de Stop Accidentes fue un posible cambio de la regulación de los semáforos, que "tendría que estudiar, concienzudamente, la Policía Local". Al respecto, el concejal de IU Raúl Ariza apuntó que estos elementos "ya se colocan en base a estudios, no crecen como setas, y se revisa continuamente su funcionamiento y utilidad", aseguró. El presidente de Stop Accidentes también mostró su apoyo a un posible paso subterráneo en Cesáreo Alierta, "pero supongo que ahora es inviable".