Tres personas presentaron un cuadro grave de gastroenteritis durante las pasadas fiesta del Pilar en Zaragoza y, tras ser hospitalizadas en diversos centros de la capital aragonesa, los análisis confirmaron su intoxicación por salmonelosis. Según apuntaron fuentes del Departamento de Sanidad, por el momento "se desconoce" el alimento ingerido y foco de la infección, pero técnicos del organismo de Salud Pública están realizando las investigaciones "pertinentes" en los diferentes establecimientos zaragozanos que visitaron los afectados.

Los tres intoxicados acudieron al médico aquejados de malestar durante el pasado fin de semana (11 y 12 de octubre) y fueron ingresados en la MAZ, en el hospital Miguel Servet y en el hospital Militar. Dos de ellos recibieron ayer mismo el alta médica, mientras que el paciente de la MAZ continúa hospitalizado.

Los últimos datos publicados por el Boletín Epidemiológico de Salud Pública de Aragón registran un total de 480 intoxicaciones alimentarias durante este 2014, un cifra ligeramente superior a la estimada por Salud Pública para este periodo, que es de 431 en función de los datos acumulados en los últimos cinco años en la comunidad. La semana pasada se detectaron en la comunidad un total de 9 casos. Cinco de ellos se dieron en la provincia de Zaragoza y los otros cuatro en la de Huesca.

La mayoría de los brotes de las toxiinfecciones alimentarias (TIA) y gastroenteritis agudas (GEA) son provocados por un alimento en mal estado. La tendencia de estas patologías alimentarias ha sido ascendente en los últimos meses en Aragón. En mayo, se superó la cifra de los 200 afectados tras un destacado brote colectivo de 13 personas. La cifra aumentó otra vez en junio, cuando se llegó a los 242. Precisamente es en la época estival cuando las intoxicaciones se disparan y los huevos y sus derivados suelen ser la causa principal de la salmonela.

TENDENCIA ASCENDENTE

Se trata de un grupo numeroso de microorganismos que suelen habitar en las superficie de los alimentos, cuya manipulación incorrecta supone la contaminación. Una mala conservación provoca que los gérmenes se multipliquen y provoquen los problemas al ingerir el alimento.

En los dos últimos años, los casos de intoxicaciones alimentarias han crecido en Aragón después de un periodo de "estabilidad" entre el 2008 y el 2012, según explicaron fuentes de Salud Pública.