El Ayuntamiento de Zaragoza está estudiando la integración de la tarjeta ciudadana en el teléfono móvil. Esta es la línea de trabajo, todavía incipiente, en la que está trabajando el área de Ciencia y Tecnología del consistorio, y permitiría afrontar los pagos que ahora se realizan con este documento acreditativo a través de los dispositivos móviles de los ciudadanos. Un paso más para fomentar la utilización de la tarjeta, que alcanzó la cifra de 218.188 emitidas al cierre del 2014 y un total de 848.015 usos.

Desde su implantación en el 2010 y tras el boom del primer año, en el que se consiguieron más de 100.000 adscripciones, el crecimiento de este título, para el que es imprescindible estar empadronado en Zaragoza, ha sido sostenido. De hecho, a lo largo del 2014 se realizaron 29.706 nuevas tarjetas, es decir, que han aumentado un 15% con respecto al 2013, en el que se emitieron un total de 188.482.

A pesar de este incremento, la tarjeta ciudadana todavía no es un documento generalizado entre los empadronados en la ciudad. Solo el 31% ha decidido pedirla, al menos si se tienen en cuenta las actuales cifras del padrón municipal --702.123 vecinos, aunque está pendiente de ser ratificada por el Instituto Aragones de Estadística-- y que la tarjeta se puede realizar desde cualquier edad. Uno de los objetivos del ayuntamiento al implantarla fue animar a empadronarse a los residentes que proceden de otros lugares.

OBJETIVO

Para ello, también se implantó una política de descuentos y bonificaciones que tienen como requisito tener esta documento, como por ejemplo, los bonos para las piscinas. No obstante, su uso estrella es para el transporte público de la ciudad, tanto bus como tranvía y en este caso, el precio del servicio es igual que para los ciudadanos que ostentan una tarjeta bus al uso --no hay rebaja para los empadronados--. Esta es la meta que se plantean, en cuanto a público objetivo, desde el consistorio. "Nos gustaría llegar a todos los usuarios habituales del transporte público en Zaragoza", asegura el director de Ciencia y Tecnología del Ayuntamiento de Zaragoza, Ricardo Cavero. Aunque no hay datos sobre pasajeros únicos, la red de transporte público de Zaragoza registró 88 millones de usos el pasado año, diez veces más que la utilización de la tarjeta en el mismo periodo.

Además, si hubiera voluntad y acuerdo político, la tarjeta ciudadana también permitiría incorporar distintos precios de los servicios públicos, como por ejemplo, el transporte, dependiendo de la renta. La información se almacenaría en la tarjeta y la rebaja se haría efectiva en el momento del pago. Por ahora, esto, aunque técnicamente posible, aún no se ha puesto en marcha, pero los avances sí podrían conllevar otras mejoras en cuanto a la comodidad del uso de este documento acreditativo. "Estamos trabajando en la forma de hacer más sencillo y accesible su uso", asegura Cavero.

Una de las futuras líneas de acción sería su integración con el teléfono móvil. De este modo, solo con su dispositivo el zaragozano podría pagar los diferentes servicios sin necesidad de llevar encima el documento. Esta iniciativa está siendo estudiada por el área y, por ahora, aún no hay fecha para su implantación, aunque los últimos avances hacen prever que el plazo para poner en marcha esta integración tampoco tendría por qué ser amplio.

Por ejemplo, ya en el 2013 se puso en marcha un nuevo método de pago para el taxi en un proyecto denominado Ztaxi por el cual Zaragoza fue la primera en adoptar la tecnología NFC, de modo que el usuario paga con la tarjeta ciudadana la carrera y los taxistas, por su parte, cobran con un teléfono móvil que hace las funciones de datáfono. El abono se realiza simplemente acercando la tarjeta al móvil del taxista.

Esta es la misma tecnología que usa la Empresa Municipal de Transportes de Valencia desde el pasado mes de julio y que permite a los usuarios adquirir los distintos títulos de transporte a través de móvil y pagar también con este dispositivo. Para hacerlo, el ciudadano solo tiene que acercar su móvil a la máquina validadora a una distancia de menos de 10 centímetros. También Logroño dispone de pago por el móvil en los autobuses urbanos. Nuevas aplicaciones al servicio del usuario.