Lecturas múltiples para un final esperado, pese a los vaivenes de última hora. El órdago del PSOE por los convenios no impidió que Zaragoza pueda celebrar esta semana que la ciudad tendrá presupuesto este año, de 701,9 millones de euros, gracias a un acuerdo entre Zaragoza en Común (ZeC), PSOE y Chunta. Tendrá la mayoría en el pleno y, sobre todo, "es el reflejo de las esencias básicas de todos", resaltó el responsable de las finanzas, Fernado Rivarés. El principal escollo para alcanzarlo, la polémica por los convenios de Acción Social, se diluyó como un azucarillo en cuestión de horas. Las que necesitaron para devolver el reparto al estado original, el que los socialistas llevaban sosteniendo durante años. Y mandar a la bolsa de subvenciones de libre concurrencia a solo 11 de los 57 convenios que estos pedían quitar, es decir, 500.000 euros sobre un montante global solicitado de casi 6 millones.

"Para este viaje no hacían falta estas alforjas tan llenas de desasosiego e intranquilidad para las entidades sociales", resumía el nacionalista Carmelo Asensio tras el acuerdo. Ellas respirarán aliviadas, ya que iban a ser las grandes damnificadas --más de 3.000-- de un presupuesto prorrogado, y el resto de la ciudad, también.

GUIÑO

Porque el pacto no ha sido sencillo, pero al final todo se reducía a una cuestión: eliminar los convenios introducidos por ZeC a Unicef, la Fundación RAIS y Cruz Blanca --70.000 euros sumaban entre los tres--, y quitar aquellos que añadían a otros convenios ya existentes cuantías más elevadas al consolidar ayudas que antes percibían por la vía de las subvenciones.

Por eso el socialista Javier Trívez valoró este "guiño" como suficiente para que su grupo municipal dé el sí hoy al presupuesto en la Comisión de Economía y el viernes en el pleno municipal. Porque el vencedor de este pulso al Gobierno de ZeC "no es una cuestión cuantitativa" sino de "acabar con esta forma de abordar la situación" de los convenios y subvenciones, con una ley recién estrenada y un informe de la Cámara de Cuentas que castigaba, y de qué manera, el reparto que durante años realizaron los socialistas. Ahora esta "vuelta de tuerca" para "dejar de fomentar el clientelismo" se ha limitado a las novedades sobre el modelo anterior, el suyo. Y en volumen de dinero, devolver a la libre concurrencia menos del 1% de esos seis millones de euros en ayudas.

Una rectificación elegante de ZeC y PSOE en favor del acuerdo. "Nunca hemos pretendido poner en duda las ayudas que reciben estas entidades ni la labor tan encomiable que realizan", declaró Trívez, que ayer prefería destacar los "8,5 millones" que ha conseguido mover, "10,5 si se incluyen los plurianuales", con sus enmiendas. El nacionalista Asensio, con 46 de sus 47 aceptadas movió "unos 5,5 millones".

Ambos daban el primer gran acuerdo político de la legislatura a ZeC y a Rivarés, "moderadamente satisfecho" por un presupuesto "mejorado" que mantiene las prioridades "intactas" y el compromiso para que convenios y subvenciones se debatan "transparente y abiertamente".

El contrapunto lo puso el futuro portavoz del PP, Jorge Azcón, que criticó esta "reedición del tripartito" que ha hecho que sus enmiendas sucumban a su "rodillo" para un presupuesto que "era malo y ahora es peor" gracias a un PSOE "electoralista" que, en la negociación, "ha intentado hacer de Podemos pero no sabe y ha acabado reculando". "Se ha hecho una enmienda a la totalidad", dijo. Para Sara Fernández, de Ciudadanos (C's), lo ocurrido es el "teatrillo" previo a la "crónica de un acuerdo anunciado".