Zaragoza en Común (ZeC) ha decidido eliminar las sillas y las gradas para ver las ofrendas de Flores y Frutos tras el fracaso del año pasado y por los elevados costes técnicos que generaba. En el 2014 se instalaron por primera vez como prueba piloto. En total se habilitaron 2.214 plazas de las que pocas fueron ocupadas. La lluvia de la noche del 11 al 12 de octubre tuvo gran parte de culpa de que la gente desechara ver la ofrenda desde las sillas ya que la mayoría estaban mojadas. No obstante, el número de entradas vendidas hasta el día anterior a la fiesta fue de 400. De este modo, el tradicional desfile de flores volverá a tener su aspecto habitual. El anterior concejal de Cultura, Jerónimo Blasco, apostó por la instalación de sillas como medio de financiación sin obtener el resultado que habían previsto desde la concejalía.