La alianza PP-PAR, consolidada en el Ayuntamiento de Zaragoza, rechazó ayer en el pleno municipal la convocatoria de un concurso de ideas para remodelar el paseo de la Independencia. Los populares impusieron su idea de reformar esta céntrica vía con el proyecto realizado en el consistorio y adjudicar la obra antes de fin de año, para inaugurarla antes de las elecciones locales del 2003. Colectivos y ciudadanos podrán opinar durante el periodo de exposición pública propuesto por el PAR, pero el equipo de Gobierno ya ha advertido que sólo se aceptarán cambios en "detalles concretos". El concurso, reclamado por el Colegio de Arquitectos, la Federación de Barrios de Zaragoza y los grupos municipales del PSOE y de CHA, estaba aprobado en el consistorio y contaba incluso con una dotación presupuestaria de cinco millones de pesetas, pero el PP decidió eliminarlo para acortar los plazos de la obra. La nueva mayoría PP-PAR se dejó notar ayer en distintos puntos del pleno: se utilizó para sacar adelante la subida de impuestos o la reforma de Urbanismo --el PP se abstuvo--, criticadas y votadas en contra por PSOE y CHA; a cambio del apoyo para evitar el concurso de ideas de Independencia, los populares respaldaron cuantas mociones presentaron los aragonesistas. Entre ellas, la que solicitaba instalar un museo industrial en la antigua azucarera, o la que hará que se destinen 35 milllones de pesetas a los comerciantes del Casco Histórico que se vean obligados a adaptar la estética de sus fachadas por la declaración de esta zona como Bien de Interés Cultural (BIC). Ni el equipo de gobierno ni la oposición utilizaron argumentos nuevos a la hora de defender sus posiciones en contra y a favor del concurso de ideas de Independencia. Antonio Suárez, portavoz del PP, señalo que es responsabilidad de los dirigentes municipales "tirar del carro para que los grandes asuntos de la ciudad vayan adelante" y recordó que el debate sobre la reforma del paseo ya se inició hace años. En 1997, dijo, el Plan Integral del Casco Histórico hablaba de recuperar espacio para los peatones, planteando un bulevar. En 1999, el plan de tráfico recogía ya la alternativa preferida por el PP, la ampliación de aceras con carriles para la circulación por el centro. El mismo plan descartaba el párking bajo el paseo, pero los aragonesistas, socios imprescidibles para realizar la obra, han hecho que se incluya. PSOE y CHA no consiguieron hacer cambiar de opinión a PP y PAR ni siquiera con su propuesta de adaptar los plazos del concurso a las necesidades electorales del equipo de Gobierno, que quiere cortar la cinta del nuevo paseo antes de los comicios del 2003. Jerónimo Blasco, portavoz del PSOE, calificó de "cutre y salchichera" la exposición pública prevista para el proyecto del ensanche de aceras, mientras que el concejal de CHA Miguel Gargallo, recordó al PP que el futuro del paseo "no termina en año y medio".