El Ministerio de Defensa entregará en breve a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) 69 hectáreas pertenecientes a la Base Aérea de Zaragoza que se destinarán a la ampliación del aeropuerto civil de la capital aragonesa.

El alcalde de Zaragoza, José Atarés, anunció ayer que la cesión de los terrenos, acordada ya en 1998, se llevará a efecto "en una fecha próxima". La exigencia por parte del Ministerio de Defensa de que sea Fomento quien asuma el coste del traslado y la reconstrucción de las instalaciones militares afectadas por la pérdida de los terrenos de su propiedad había venido retrasando la aplicación del acuerdo. El desbloqueo de este punto ha permitido el cambio de manos de los terrenos.

Las 69 hectáreas se destinarán a la ampliación de los usos civiles del aeropuerto y permitirán atraer a empresas de logística que habían rechazado el emplazamiento debido a la falta de espacio para el desarrollo de sus actividades. La cercanía de la plataforma logística, actualmente en construcción, redundará en la potenciación del aeropuerto de Zaragoza. El ayuntamiento impulsará la creación de una sociedad de promoción de la plataforma logística de carga aérea entre AENA y CLASA (Compañía de Gestión Logística de Aeropuertos) con el fin de elaborar un plan estratégico de desarrollo.

El alcalde informó también ayer de la aprobación de la licencia de derribo del antiguo acuartelamiento de Valdespartera, a partir lo cual se podrán iniciar las actuaciones de urbanización de este entorno, en el que se proyecta la construcción de 10.000 viviendas.

El derribo lo tendrá que acometer la sociedad Ecociudad Valdespartera, cuyo consejo de administración se reunirá en marzo para aprobar el pliego de condiciones del derribo, según el alcalde de Zaragoza. La obra tiene un presupuesto de 1,9 millones de euros y un plazo de ejecución de tres meses. Esta licencia, dijo Atarés, supone el "banderazo de salida" para la construcción de las viviendas. El objetivo es calificar este año 1.500 viviendas protegidas.