La Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ) estudiará nuevas fórmulas financieras para este ejercicio con las que evitar situaciones de déficit a la hora de costear sus proyectos, que hasta ahora se realizan con apoyo institucional. Esta fue una de las conclusiones a las que se llegó ayer en la asamblea extraordinaria de la federación, donde también se presentaron los cinco nuevos representantes del Secretariado y se reeligió, sin sorpresas, por dos años más como presidente de la entidad a Alberto Andrés con 58 votos a favor y ninguno en contra.
Con las aguas más calmadas que de costumbre, los vecinos aprobaron ampliamente el informe de gestión. A este respecto, Andrés apuntó a este diario que las entidades vecinales han valorado positivamente el esfuerzo y el trabajo realizado en el último ejercicio. De hecho, incluso los más críticos en el interior de la federación no han suspendido el informe. "Continuaremos trabajando en la misma línea, pero con un cambio en la financiación que suponga menos apoyo institucional y un nuevo modelo organizativo más reforzado", explicó Andrés en el trascurso de la jornada.
Sin embargo, también se escucharon opiniones en contra. La presidenta de la Asociación de Vecinos Tío Jorge y una de las personas que deja un puesto en el secretariado este año, Esther Blasco, criticó duramente el informe de gestión. "Hipotecará económicamente a la federación y no es realista", manifestó en el trascurso de la votación.
Andrés recalcó que el presupuesto del ayuntamiento para la FABZ este año se ha reducido "simbólicamente" en 30 euros. Por otro lado, la entidad soportó a principios de año un déficit de 6 a 8 millones en el proyecto del programa de drogodependencias, que se volvió insostenible para la FABZ. Ante esta situación, la entidad estudiará en los próximos meses fórmulas financieras que supongan "menos apoyo institucional" con el objetivo de incrementar las arcas con una economía social.
Además, la asamblea anual debatió ampliamente la idea de unos presupuestos municipales participativos. Los representantes de las asociaciones vecinales aprobaron una propuesta en la que se instaba a la FABZ a trasladar la intención de los ciudadanos de participar activamente en los presupuestos del ayuntamiento, así como en la construcción de la ciudad. En este sentido, también pidieron a los distintos partidos políticos compromisos en sus programas para garantizar esta participación.
Por último, la asamblea trató la situación interna de la federación. Los vecinos aprobaron el actual modelo organizativo, aunque no descartaron la posibilidad de incluir grupos de trabajo que refuercen la estructura de la entidad. "Queremos abrirnos a todo el mundo y recuperar la actividad vecinal de tiempos pasados", dijo Andrés.
