La Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) solicitará al Servicio Aragonés de Salud la implantación del programa corazón , puesto en marcha en otras comunidades autónomas, con el fin de reducir la mortalidad y la morbilidad en el síndrome coronario agudo o infarto. Este programa permitiría definir protocolos de manejo del infarto para unificar la actuación de los profesionales desde el primer momento en que se detecta, consensuando tanto la clasificación del infarto hasta el tipo de tratamiento y, sobre todo, acortando tiempos en la asistencia que se presta al afectado en los eslabones de la cadena sanitaria. El síndrome coronario agudo es la primera causa de muerte en personas de más de 45 años.

Este es uno de los objetivos de las jornadas que ha organizado la Semes y que se celebran en Formigal hasta el jueves. José Luis Casado, presidente del comité organizador y jefe de Urgencias del hospital Miguel Servet de Zaragoza, destacó que el programa corazón será una de las grandes reivindicaciones del congreso que se inauguró ayer. "Algunos estudios demuestran que pasan 130 minutos desde que el paciente es atendido en Primaria hasta que llega al hospital y que se produce una demora de 120 minutos, esta vez intrahospitalaria, hasta que se instauran los tratamientos específicos", apuntó Casado.

Para el presidente de las jornadas es necesario mejorar los tiempos y el manejo de los infartos, así como actuar con la máxima rapidez en los tratamientos. "Hay fármacos que permiten recanalizar o volver a abrir la arteria obstruida tras un infarto, como son los fibrinolíticos, que si se usan de forma inmediata tienen efectos beneficiosos del 90% mientras que a partir de las 10 o 15 horas, este efecto se reduce al 5%". Casado aludió a la necesidad de una mejor coordinación a través del 061 para atender al afectado en el acto, bien mediante una UVI móvil o con un helicóptero medicalizado. "Necesitamos además consensuar los protocolos para que todos médicos actuemos del mismo modo".

Las jornadas analizarán además la estructura y organización de los servicios de urgencias y emergencias en España, la asistencia de la infección respiratoria en urgencias, y que representa hasta el 10% de las demandas del servicio, y las intoxicaciones en la infancia.