Las obras de la Variante de Calatayud arrancaron la semana pasada, después de que tras la colocación de la primera piedra en julio del año pasado se tuviera que readaptar el proyecto, al aprobarse la construcción del AVE Calatayud-Soria y cruzarse ambos trazados. El ayuntamiento bilbilitano confirmó ayer que las obras ya han comenzado y que en el plazo de unos diez días se prevé que empiece el pilotaje del puente que sobrevolará la antigua N-II, las actuales vías del AVE Madrid-Lérida y el río Jalón.

La variante conectará directamente la autovía N-II, Madrid-Zaragoza, con la carretera N-234, evitando así que esta última siga pasando por el casco urbano de la ciudad. El trazado tendrá una longitud total de 2.451 metros, según el proyecto que se presentó cuando, a primeros de julio, colocó la primera piedra el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco.

MAS DE OCHO MILLONES Las obras fueron adjudicadas a la constructora Aldesa, por un presupuesto de 8,2 millones de euros, casi 1.400 millones de pesetas, y un plazo de ejecución de 24 meses. El presupuesto, sin embargo, se ha visto incrementado con las readaptaciones que han debido incluirse, según anunció ayer el alcalde bilbilitano, Fernando Martín, ya que la variante tendrá que sobrevolar otra línea férrea más, la de la futura línea de Alta Velocidad Calatayud-Soria.

Martín afirmó que el "ojalá todas las obras se pararan o se frenaran porque aparecen nuevas infraestructuras, como ha ocurrido en este caso". El edil recordó que, cuando se colocó la primera piedra de la variante, no estaba cerrada la decisión de construir el AVE Calatayud-Soria, para el que a primeros del pasado mes de febrero se licitó la redacción del proyecto técnico de obras.