El alcalde de Zaragoza, José Atarés, manifestó ayer que no hay soluciones "sencillas e inmediatas" para acabar con las graves afecciones por el corte de Delicias y aseguró "entender y compartir" el problema de los vecinos. Atarés quiso responder así ayer a la asamblea celebrada el martes en el barrio, en la que se exigió la apertura inmediata de la intermodal para trenes convencionales con el fin de poder levantar las vías de la avenida Madrid. En la reunión se acordó convocar una concentración el 4 de abril.

Atarés reiteró que la demora del AVE implica también un retraso en la solución a la avenida Madrid, aunque insistió en que se están haciendo gestiones con Fomento "para ver si hay alguna respuesta tecnológicamente adecuada que permita que se pueda actuar inmediatamente", informó Europa Press. También respondió a las críticas de la oposición sobre la escasa presión municipal: "Es difícil quitar los raíles cuando se tiene que mantener la circulación ferroviaria del noreste de España".

Por otra parte, Chunta adelantó que presentará enmiendas al proyecto de ley ferroviaria para impedir que se imponga, como en el caso de la estación de Zaragoza, la innecesariedad de que las infraestructuras férreas se sometan a control municipal mediante la solicitud de licencias. Además, el PAR criticó que Fomento no incluya a la capital en su programa de inversiones en cercanías, que se alarga hasta el 2010.