Una mujer de 60 años, Dolores A. V., fue detenida el pasado miércoles después de que asestara dos puñaladas a su marido en la localidad levantina de Oropesa de Mar. El matrimonio, que es originario de Zaragoza, se peleó después de que la víctima fuera sorprendida en adulterio por la agresora.

La mujer manifestó que lo hizo para defenderse de una agresión de su esposo, según fuentes cercanas al caso. La mujer relató que presuntamente había sido víctima de maltrato en otras ocasiones por parte de su marido, si bien hasta la fecha no consta ninguna denuncia contra él.

Los hechos ocurrieron entre las 16.00 y las 17.00 horas cuando la mujer llegó a su apartamento, situado en la playa de la Concha de esta localidad, y sorprendió a su marido acostado con otra. Tras una discusión entre ambos, la mujer empuñó un cuchillo de cocina de cinco centímetros de hoja y asestó al presunto adúltero dos puñaladas a la altura del tórax.

Según informaron testigos presenciales, la agresión provocó un gran revuelo entre el vecindario y se alertó a la Policía Local y a la Guardia Civil, que desplazaron varias unidades al lugar de los hechos.

El herido fue trasladado en una ambulancia hasta el Hospital General de Castellón, donde el personal sanitario que le atendió advirtió la gravedad de las heridas y decidió su intervención quirúrgica.

Según la versión de la detenida ante la Guardia Civil, se había ausentado de su domicilio para pasear por la playa con un familiar y otras vecinas, y su marido se quedó solo. A su regreso a la vivienda, en un tercer piso del bloque de apartamentos Oroblanc, encontró a su marido con una joven, lo que provocó una discusión entre ambos, que fue escuchada por unos obreros que trabajan en unas obras próximas a la urbanización y que terminó con el apuñalamiento de Salvador G.

PREJUBILADO El matrimonio implicado se había empadronado en Oropesa de Mar desde el pasado día 20, si bien residía en esta localidad desde hace unos dos años, adonde se había desplazado procedente de Zaragoza, según explicaron vecinos de la zona.

Al parecer, problemas económicos surgidos en la empresa donde trabajaba Salvador le llevaron a cerrarla y obtuvo la prejubilación, por lo que la pareja decidió trasladar su residencia a este municipio costero.

"Se trata de un matrimonio que aparentaba la más absoluta normalidad. Desconocíamos que hubiera problemas entre ellos y nos han sorprendido estos hechos violentos. Siempre estaban juntos y él acostumbraba a salir a pasear con su perro", manifestaron unos vecinos.

Según el parte médico, la víctima presentaba dos heridas por arma blanca, una de las cuales no era muy profunda y le afectó al hemitórax izquierdo, en cavidad torácica, que fue revisada y suturada.

La otra herida, que sí que era penetrante, le alcanzó al abdomen, lo que obligó a una laparatomía exploradora bajo anestesia general, según informaron fuentes de ese centro hospitalario, que añadieron que se le revisó la cavidad abdominal sin encontrar lesiones reseñables. Tras la intervención quirúrgica, fue ingresado en la planta de Cirugía, donde permanece estable e inicia la tolerancia a los líquidos, evolucionando favorablemente.

Tras estos hechos, la mujer fue conducida al cuartel de la Guardia Civil de Oropesa, donde declaró sobre lo sucedido y quedó en libertad, si bien queda pendiente su declaración judicial.