El teniente de alcalde de Urbanismo, el nacionalista Antonio Gaspar, ha dado orden de que se entre en contacto con Renfe para conocer qué procedimiento ha seguido el proyecto de la nueva vía que ha de enlazar La Montañanesa con la línea férrea de Barcelona y cuyos primeros trabajos se iniciaron hace diez días, antes de que se cuente con un fallo de la Audiencia Nacional.

Los afectados por este trabajo denunciaron al Ayuntamiento de Zaragoza que se había entrado "a la brava" en sus campos, ya que no ha habido comunicación previa ni pago de la expropiación. Los vecinos, que rechazan esta obra porque a su juicio anula las posibilidades de seguir explotando la huerta de Cogullada, denunciaron la entrada de las máquinas a campos que no están expropiados, además de graves afecciones en la ribera del Gállego.

Los vecinos elevaron sus preocupaciones al concejal de Grandes Proyectos e Infraestructuras, el socialista Ricardo Berdié que, a su vez, ha trasladado la cuestión a Urbanismo, ya que la nueva infraestructura no aparece reflejada en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

El teniente de alcalde de Urbanismo explicó que sólo sería posible que no se respetara el PGOU si hubiera una autorización expresa del Consejo de Ministros, aunque en este momento se desconoce si se ha seguido este procedimiento. Gaspar consideró que entre las instituciones debe haber "cortesía y buen funcionamiento", ya que además las afecciones "se van a sufrir en el ámbito local", explicó.

El responsable del equipo de Gobierno señaló que es fundamental saber el trazado de la vía, si afecta a zonas protegidas y el impacto ambiental, que de momento no ha llegado al consistorio zaragozano.