La muerte de Manuel Pablo A. A., de 23 años, el martes por la noche cuando se dirigía a Borja, su localidad natal, disparó ayer nuevamente todas las alarmas en la plataforma que clama por el desdoblamiento de la carretera N-232 en el tramo Figueruelas-Mallén. El nombre de este joven borjano se suma a una lista en la que ya aparecen durante este año otros ocho fallecidos, además de 14 heridos graves y 19 leves. Los datos lo dicen todo: en esos 25 kilómetros se producen el 10% de los accidentes anuales en la provincia de Zaragoza.

El alcalde de Mallén, Antonio Asín, explicó ayer a este diario que el nuevo accidente mortal pone de manifiesto una vez más la necesidad de desdoblar la nacional 232 en ese tramo, tal y como se hace o se ha proyectado ya en territorio navarro. "Está claro que este es un embudo mortal", comentó Asín, cabeza visible de una plataforma integrada por decenas de partidos, instituciones, organismos, asociaciones, sindicatos, empresarios, comerciantes y transportistas.

El primer edil de Mallén relató a este diario que el martes, Manuel Pablo A. A. se empotró brutalmente contra un camión cuando abandonaba la autovía a la altura de Figueruelas y entraba en el polémico tramo que está sin desdoblar. "Mucha gente intenta quitarse de encima todos los camiones que puede antes de entrar en el tramo malo y...". Y es que esta carretera tiene un tráfico de 14.000 vehículos diarios, siendo unos 6.000 de ellos pesados.

50 MUNICIPIOS Antonio Asín indicó también que hasta 50 municipios de las tres comarcas implicadas (Tarazona-Moncayo, Ribera Alta del Ebro y Campo de Borja) van a aprobar en sus respectivos plenos una moción para afianzar aún más la petición de desdoblamiento. El objetivo es obligar al Gobierno central a que incluya el proyecto en el plan de carreteras 2002-2007, algo que ahora mismo no sucede. "O entramos en ese plan, o el embudo mortal acumulará más y más víctimas".