Una fuerte tormenta de agua y granizo cayó ayer tarde sobre la zona de las Peñas de Riglos y Murillo de Gállego causando desprendimientos de rocas que invadieron la calzada de la A-132 obligando a cortar el tráfico de dicha carretera en determinados momentos.

Según informaron fuentes del Gobierno de Aragón, eran aproximadamente las 18 horas cuando una fuerte tromba de agua y granizo descargó sobre los alrededores del pantano de la Peña en la Comarca de la Hoya de Huesca. La intensidad de la tormenta causó desprendimientos de tierra y rocas que llegaron a invadir la calzada de la A-132, carretera que une Huesca con el Puente de la Reina. Concretamente en el término municipal de Murillo de Gállego los desprendimientos obligaron a cortar dicha carretera y, a las 21 horas de ayer, aún no se había restablecido la circulación.

Sin embargo, las mismas fuentes informaron de que varios equipos con maquinaria del Servicio Provincial de Carreteras estaban trabajando desde el primer momento para retirar las piedras y el agua de la calzada para restablecer la circulación lo antes posible.

La tormenta también afectó a la localidad altoaragonesa de Las Peñas de Riglos. Allí, varios vecinos observaron sorprendidos como los barrancos de la zona bajaban al límite de su capacidad, por lo que en algunos puntos se hizo necesaria la intervención de los bomberos.

Mientras, la Guardia Civil aconsejaba a los conductores dar marcha atrás y volver a subir hasta el Puente de la Reina y bajar por Monrepós, donde ayer tarde también descargó una importante cantidad de agua.