Pedro Jodar López, de 42 años, fue condenado ayer por la Audiencia Provincial de Zaragoza a dieciséis años de cárcel y a pagar a su hermana una indemnización de 100.000 euros por haber matado a su padre, en febrero del 2001, en la calle Alfonso Solans de la capital aragonesa.

El abogado defensor, Luis Moros, confirmó a Efe que la Audiencia Provincial ha dictado su decisión final después de que el juicio contra Pedro Jodar quedara visto para sentencia el pasado miércoles, 19 de noviembre.

En el juicio, celebrado en la Audiencia Provincial de Zaragoza con jurado popular, la Fiscalía y la acusación particular solicitaron una pena de 17 años de prisión, mientras la defensa pidió únicamente quince.

El condenado mató a su padre, de 68 años, de dos disparos para evitar, según declaró entonces a la Policía, que conociera sus dificultades económicas. "Quería evitarle a mi padre un disgusto", explicó el condenado en la primera sesión del juicio.

El parricida efectuó dos disparos en la cabeza con una pistola Walter de 9 milímetros contra su padre, Adolfo Jodar, que fue encontrado muerto sobre una cama.

Pedro Jodar declaró cuando fue detenido que había actuado "bajo la presión de una difícil situación económica que deseaba evitar que su padre conociera".

El parricida fue detenido en la puerta de su domicilio, donde esperó a voluntad propia a que llegaran los agentes de policía, tras alertar por teléfono al servicio de emergencia 112 de Aragón del asesinato. Pedro adimitió que se gastó los ahorros de su padre.