Dos centenares de personas, según los organizadores, se concentraron en la tarde de ayer en la plaza de España de Zaragoza "a favor de la libertad de expresión y en contra de los abusos policiales". La manifestación, convocada por la Coordinadora de Afectados, que agrupa a los ciudadanos que por la mañana habían comparecido en la Audiencia acusados de agredir a policías locales, transcurrió sin incidentes, bajo una pancarta con el lema No a la represión, por los derechos civiles. El abogado Pablo M., que en la vista oral había comparecido a la vez como inculpado y letrado defensor, leyó un manifiesto en el que señaló que "el 13 de octubre del 2000 un grupo de unas 250 personas se concentraba en la calle Alfonso para impedir que la Policía perpetrara la flagrante injusticia de detener a dos ecuatorianas que se habían negado a recoger prestas su hatillo al paso de un coche policial". El abogado calificó la actuación policial de "injustificada e injustificable".
