Esta es una bella tradición heredada que, desde hace cuatro décadas, encuentra espacio en la agenda del barrio de las Delicias. En el mes de septiembre, unos 130 mayores reciben su invitaciones para un homenaje con solera, para comer, bailar y convertirse en los reyes de una fiesta. Una celebración para honrar a la tercera edad que la Agrupación en Honor a los Ancianos de Delicias (que así se llama) heredó de dos de sus fundadores, Ángel Delgado y Nicolás Gratal. "Ellos compraron un local y lo cedieron a la asociación para que, con el dinero que se sacara de la renta, se invitara a todos los mayores del barrio a una comilona una vez al año", explica Carlos Mozota, miembro de la entidad. Hoy, la invitación se hace extensiva a "cuantos se puede, cambiando la lista de un año a otro". La tradición volvió a cumplirse este fin de semana, con una sesión de menú y guateque en el Restaurante Garden.

Las fuerzas vivas del barrio se unieron como viene siendo habitual a la cita. Allí estuvieron Jesús Diarte, miembro de la junta de distrito y pregonero de las fiestas de Delicias este año; Emilio Alloza, párroco de San Valero, Arturo Eslava, presidente de la Asociación de Comerciantes de calle Delicias, Enrique Moreno, por la Policía de Barrio, y Eugenio Bayo, como presidente de la entidad anfitriona.

Pero los grandes protagonistas fueron José Díez Segura, nacido el 31 de octubre de 1910, y Encarnación Romeo Gracia, de 1915, homenajeados con una Virgen del Pilar y dulces por ser los más mayores de la reunión. "Aquí los más jóvenes no tienen menos de 75 años, son gente del barrio y nadie se puede imaginar lo que esta fiesta representa para ellos", añadía Carlos Mozota. "Para nosotros es el sueño y el trabajo de todo el año y también una especie de compromiso con un ideal que se mantiene vivo en el barrio".