La Jefatura de Policía de Zaragoza calificó de accidente laboral el suceso en el que resultó herido de bala un agente cuando investigaba una muerte en el Coso. Si bien no se ha revelado oficialmente su identidad, las fuentes consultadas señalaron que "es un funcionario muy experimentado en el manejo de las armas de fuego; no es un novato". Asimismo, atribuyeron a la sensibilidad del modelo de pistola el disparo fortuito. El arma había cargado un proyectil en la recámara de forma automática tras ser disparada por última vez, una circunstancia que era bien conocida por el agente, quien tampoco la sometió a un manejo brusco ni a una presión inhabitual cuando la inspeccionaba, añadieron las citadas fuentes.