La crisis ha marcado los presupuestos de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) para el próximo año 2009 que se aprobarán previsiblemente hoy en una sesión extraordinaria del pleno. El gasto corriente se reducirá en un 11,51% y diputados y altos cargos de la institución verán congelados sus sueldos. Javier Lambán, presidente de la DPZ, acompañado del diputado de Chunta Aragonesista José Antonio Acero y del portavoz del grupo provincial del Partido Aragonés, Fernando Labena, explicó que los presupuestos están marcados por esta austeridad con el objetivo de favorecer la inversión "para favorecer el empleo" y, especialmente, apoyar a los ayuntamientos. De hecho, "se ha estudiado la posibilidad de ayudar a los consistorios a refinanciar su deuda" e, incluso, "endeudarse más si es preciso".

Concretamente, el presupuesto correspondiente a las transferencias para inversiones en los ayuntamientos se incrementa hasta los 48 millones de euros, un 10% más. La diputación ya ha procedido a convocar los planes para que los municipios puedan empezar a utilizar el dinero lo antes posible. En este sentido, Fernando Labena valoró positivamente la evolución de la demanda de obras, que ha pasado de "casi únicamente agua, alumbrado y pavimentación" a "pequeñas piscinas, residencias, centros de cultura o salas polivalentes", lo que, a su juicio, es muestra de la mejora de los servicios y de la calidad de vida.

Asimismo, entre las líneas de actuación más relevantes, los representantes políticos señalaron el mantenimiento del gasto destinado a programas sociales, el impulso a las políticas medioambientales mediante el desarrollo de la Agenda 21 local en los municipios, la administración electrónica, la Agencia Provincial de Planeamiento o el operativo Zaragoza Cuarto Espacio. La cifra total asciende a 188.307 euros, un 1,43% más que en el ejercicio anterior, si bien Lambán quiso matizar que, descontando las cantidades recibidas para financiar proyectos relacionados con la Expo, el incremento asciende a un 5,73%.