Miguel Ángel Blanco, el concejal de Ermua asesinado por ETA en 1997, ya era hijo predilecto de Zaragoza. Ahora tendrá una calle en el barrio de Valdefierro. Sustituirá a Amanecer, diario del Movimiento de la FET y de las JONS desaparecido hace 30 años, con ocasión de las primeras elecciones legislativas democráticas tras aprobarse la Constitución.

En la memoria colectiva quedan aquellas jornadas de julio de 1997, en las que la felonía de la banda terrorista consiguió sacar a la calle a españoles de todas las tendencias para exigir a ETA su liberación inmediata y sin daño. Vanas esperanzas cuando los asesinos no entienden de voluntad popular. El cuerpo de Blanco fue hallado el día 10 de ese mes y el crimen marcó un antes y un después en la lucha contra el terror. El edil se convirtió en un mártir de la democracia y ETA culminó su escalada de descrédito.

Se llama el espíritu de Ermua al deseo de concordia entre las personas de diversa ideología y a la defensa de los valores democráticos desterrando la violencia.

Para homenajear a Blanco se ha elegido una calle estrictamente residencial --solo hay dos comercios en su recorrido-- con edificios que no superan las tres alturas. Sus vecinos recuerdan que se le dio el nombre de Amanecer "porque era la época de los periódicos. Después vinieron las calles de las flores y, más tarde, de los astros y del horóscopo. Era en los primeros años 70", recuerda Concha, una veterana a la que no le hace ninguna gracia el cambio de nombre. "Ahora habrá que cambiar la dirección de todos los recibos y en la documentación. Los políticos tendrían que entretenerse en otras cosas más importantes", dice.

Cuando le llegó la calle, Amanecer estaba en vísperas de cierre. El periódico nació con la rebelión militar, el 11 de agosto de 1936, en las instalaciones incautadas al Diario de Aragón, surgido con el Frente Popular y que se autotitulaba Defensor de la República.

No tuvo una trayectoria brillante en ninguna época el periódico de la Falange, pese a que no escasearon las firmas de prestigio en diferentes etapas. Tampoco le respondió la difusión, pese a que era prensa de obligada adquisición para ayuntamientos de la provincia e instituciones del régimen. Un antiguo redactor recuerda que, "siendo caritativos, nunca se puede decir que la tirada superara los 5.000 ejemplares. Aunque tal vez lo hiciera en los primeros años de triunfo de la rebelión". En los años 60 ya languidecía y, cuando se cerró, la edición estaba en torno a 2.500 ejemplares.

Con este cambio de calle ocurre lo contrario que en otras que se han aprobado en el mismo paquete. La mayoría de los vecinos consultados sabe quién fue Miguel Ángel Blanco, pero pocos relacionan el nombre actual con el diario del Movimiento, como señala Raúl, que tiene piso allí desde hace 16 años: "El nombre me suena bonito porque creía que lo de amanecer venía por la hora en que clarea el día".

Tampoco estaba seguro Mario. Sabe, no obstante, que el cambio obedece a la Ley de Memoria Histórica, "y todo lo que venga de esa ley me parece perfecto. Sospechaba que el nombre actual venía de algo de la dictadura, como el de Radio Juventud, que también cambia".

Quien se manifiesta ilusionada con el nuevo nombre es María del Mar Blanco, hermana del edil asesinado, aunque ayer mostró su extrañeza de que nadie le hubiera informado (se enteró por este diario). "Posiblemente se pondrían en contacto con la fundación --Foro de Ermua--y nadie me dijo nada. Mi hermano era muy devoto de la Virgen del Pilar y todos los años viajaba al menos una vez a Zaragoza", explicó.

Precisamente, estos días se ha inaugurado otra calle con el nombre de su hermano en una pedanía de Lepe (Huelva). "Estoy muy contenta por estos recuerdos a mi hermano y, si me avisan de la fecha en que se coloca la placa en Zaragoza, haré lo imposible por ir para agradecer el homenaje", añadió.

Calle Miguel Ángel Blanco

El secuestro y posterior asesinato del concejal del PP en Ermua Miguel Ángel Blanco movilizó en 1997 todas las voluntades contra la intolerancia y la política de las pistolas y las bombas. Centenares de miles de personas salieron a las calles para exigir su liberación, pero el Estado no cedió al chantaje de ETA y la banda terrorista se vengó asesinado al rehén.

Hoy se llama: calle Amanecer

El diario Amanecer nació en 1936, menos de un mes después de que triunfara la rebelión militar en Zaragoza. y tuvo una trayectoria poco brillante en los 43 años en que fue el órgano de prensa del Movimiento. Sus trabajadores lo reconocían, jocosamente, como "el mejor periódico de la calle Porcell", por el lugar donde se ubicaba.