Policías para todos los actos

Las poblaciones del extrarradio de Zaragoza crecieron rápidamente durante la pasada década. Pero no ocurrió lo mismo con los servicios, entre ellos el de Policía Local, que antiguamente era desempeñado por alguaciles o, simplemente, no existía. Eso explica que localidades como Zuera y Cuarte, que andan por los 9.000 habitantes, solo cuenten con ocho o nueve agentes en sus respectivas plantillas.

En ocasiones, las dependencias de la Policía Local coinciden en la misma localidad con cuarteles de la Guardia Civil y la norma es que haya una buena colaboración entre ambos cuerpos. Pero la Benemérita, que también suele estar falta de personal, cubre un extenso territorio, no solo el municipal, y además tiene encomendadas funciones que exceden del cometido de los locales.

Esta circunstancia hace que los policías del área metropolitana de la capital aragonesa tengan que "hacer y saber de todo", como explica Sergio Arbués, jefe del cuartel de Zuera. "La falta de personal es un problema crónico y tenemos que valernos de nuestros propios medios y recursos para hacer frente a situaciones de lo más variado", asegura.

Los agentes, además de regular el tráfico, han de cubrir actividades relacionadas con el medio ambiente, la pequeña delincuencia, los malos tratos domésticos, los conflictos vecinales y los daños en propiedades, más labores de protección civil. En la ciudad de Zaragoza, la abundancia de medios humanos permite crear unidades especializadas, pero en su área metropolitana es un objetivo inalcanzable.

Solo en Utebo (18.000 habitantes y 23 policías) se ha llegado a cierto grado de especialización, lo que no exime a los agentes de dedicarse "a cualquier otra cosa cuando son requeridos", en palabras del responsable del cuartel local.

En realidad, la normativa señala que lo ideal es que haya dos policías por cada 1.000 habitantes. Pero esta regla no la cumple ningún municipio del entorno zaragozano, si bien en tres de ellos (Utebo, Ejea y La Almunia) está previsto aumentar las plantillas.

Resulta que la Policía Local es un servicio muy requerido. "Somos el cuerpo policial que está más cerca del ciudadano y eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes", explica el responsable de un cuartel de la provincia de Zaragoza que prefiere mantener el anonimato. "Por un lado dominas el medio en el que te mueves, y por otro, te granjeas enemistades fácilmente porque eres la cara visible y conocida de la autoridad", afirma.

Ello no impide, como reconocen los propios policías, que las localidades en las que ejercen su trabajo sean, por lo general, "tranquilas". Los vecinos están contentos con el nivel de seguridad, como lo puso de manifiesto una reciente encuesta de Ebrópolis. Según sus conclusiones, el 61,3% de los residentes está "satisfecho".