Los grupos de CHA e IU en las Cortes de Aragón han presentado hoy una petición formal para solicitar una comparecencia urgente del presidente, Marcelino Iglesias, en la Diputación Permanente de la Cámara, para explicar el impacto de los recortes anunciados por el ministro de Fomento, José Blanco, y qué alternativas estudia para hacerles frente.

El escrito de petición de convocatoria de una Diputación Permanente ha sido presentado en el registro de las Cortes por los portavoces parlamentarios de CHA, Nieves Ibeas, y de IU, Adolfo Barrena, para que sea el presidente Iglesias quien comparezca para expresar la opinión del Gobierno aragonés respecto a la anulación de los contratos de obras en infraestructuras previstos para Aragón.

En una rueda de prensa conjunta posterior, Ibeas ha calificado la situación de "muy grave" y ha lamentado que la iniciativa de una comparecencia en la Cámara regional no hubiera partido del propio Ejecutivo autónomo, a cuyos representantes ha responsabilizado de mantener una actitud "dócil y sumisa" frente a las decisiones adoptadas en Madrid respecto a Aragón.

"Si (Iglesias) no da un puñetazo en la mesa en unas circunstancias tan graves como éstas -ha asegurado-, con una situación de consecuencias nefastas para el desarrollo futuro de Aragón, no lo entenderemos".

Ha añadido que durante su comparecencia, Blanco no habló explícitamente de Aragón ni de las reprogramaciones de proyectos que podrían verse afectados por los recortes, por lo que ha insistido en la necesidad de que el mandatario aragonés comparezca con información precisa de las consecuencias de las medidas anunciadas y de las alternativas previstas.

Tras calificar de "patéticas" las primeras declaraciones hechas por el presidente Iglesias y su consejero de Obras Públicas, Alfonso Vicente, al entender que justificaban las medidas anunciadas, Ibeas ha subrayado que los recortes, en un territorio como Aragón, colocan a la Comunidad en una posición "muy mala" para hacer frente a la crisis".

Por su parte, el portavoz de IU ha insistido en la "gravedad" de las consecuencias que puede acarrear para Aragón la anulación y reprogramación de obras "necesarias" para la vertebración del territorio, y en el desempleo que generará, alrededor de 1.500 puestos de trabajo directos y un número sin evaluar de empresas de servicios locales que se verán afectadas negativamente por esta situación.

Ha criticado, además, las manifestaciones hechas desde el PSOE aragonés respecto a las medidas anunciadas por Blanco en el sentido de que "no había más remedio", y ha insistido en que la sociedad aragonesa debe exigir al Gobierno autónomo "algo más que obediencia ciega".

En su opinión, "cuando tenemos un vicepresidente (José Ángel Biel) que dice que de la crisis no se puede salir por la izquierda y vemos que Iglesias se calla, ante eso a la izquierda nos toca combatir esa decisión que conlleva más paro y menos estado de bienestar social, y que, además, contrae la economía y hace más difícil la salida de la crisis".

Ha añadido que esperan que Iglesias "no frene" esta iniciativa que han planteado IU y CHA porque "es la última prueba que tiene del algodón, para ver si son capaces al menos de dar la cara".

Fuentes del Parlamento aragonés han explicado a Efe que la mecánica de la Cámara obliga al presidente, Francisco Pina, a someter a debate esta petición en un plazo de ocho días, para su aceptación o rechazo, en el caso de que no se ajustara al reglamento.

Han añadido que, formalmente, una petición de reunión de la Diputación Permanente debe aceptarse si la solicitan dos grupos parlamentarios o un quinto de los diputados de la Cámara, por lo que la solicitud de CHA e IU debería desembocar -han concluido- en una reunión de este órgano que se reúne en periodos entre sesiones, o en una convocatoria de un pleno extraordinario.