Tiene ya diez años, pero sigue llenando como ningún otro todas las plazas en las que actúa. El historial del toro Ratón, plagado de numerosas cogidas y una jornada mortal en el Puerto de Sagunto, en el 2006, ha convertido a este animal en un mito en el mundo de la tauromaquia popular. Los vecinos de Ricla podrán disfrutar hoy de su actuación dentro de las fiestas en honor a santa María Magdalena. No es poco, porque el astado, que llega por primera vez a la provincia, solo hace unas pocas actuaciones al año por las que los promotores llegan a pagar hasta diez veces más de lo habitual, unos 6.000 euros.

"Más que un toro, es una leyenda". Con estas palabras resume su propietario, Gregorio de Jesús, el valor de Ratón. El ganadero ha encontrado en el animal la gallina de los huevos de oro y lo sabe, aunque asegura que se trata del "más barato de todos" por los cuantiosos beneficios que reporta a los que lo incluyen en sus programas.

"La gente se extraña de lo que cuesta, pero atrae a diez veces más público que cualquier otro", afirma. No es solo el espectáculo en sí --las entradas de Ricla se venden a diez euros--, sino también los bares o los comercios de los municipios por los que pasa, que se abarrotan en un solo día. "Él solo es una publicidad para el pueblo y para la comarca --explica--. Deja tantos beneficios que casi cubre el presupuesto de las fiestas".

Sin jubilación

Con una década de vida a sus espaldas, el animal sigue en activo. Ya hace tiempo que su propietario se planteó jubilarlo, pero la insistencia de los ayuntamientos le hizo desistir. Es un importantísimo alivio para esta ganadería en un momento en el que la crisis está haciendo mella en el sector, y de Jesús lo cuida restringiendo sus intervenciones. "Lo pide mucha gente, pero no hacemos más de siete u ocho al año --explica--. Quiero que tenga un buen descanso, y no pienso solo en Ratón sino en los que le contratan, que se merecen un buen espectáculo". El ganadero reconoce que el trabajo del astado ya no es el mismo que cuando contaba con tres o cuatro años pero, "salvando la edad", nadie tiene queja de su actuación.

¿Su secreto? Que no "trabaja a lo bruto", sino que su baza es la inteligencia. Ello, unido a su rapidez y agilidad, lo ha convertido en el protagonista de algunas de las escenas más impactantes de los últimos años en los festejos populares.

La jornada festiva de hoy, dedicada a los jubilados, se completará con el encierro, las vaquillas y el espectáculo de arte a fuego y toro de ronda en la plaza, además de con la misa en honor de los mayores y la comida en el salón de la pista. La noche, con bingo, estará amenizada por la orquesta El mundo. Una lucha de barro y las Dirty Cats cerrarán el programa de las fiestas, que terminarán mañana con el último encierro, los recortadores, el toro embolado, la misa mayor, la exhibición de cortadores de leña y la traca final.