El consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, ha explicado hoy a los diputados de las Cortes que aunque el número de obras iniciadas del Pacto del Agua no ha variado mucho en los últimos años, en los tres últimos ejercicios la inversión ejecutada del conjunto del plan ha pasado del 36 al 47 por ciento. Boné ha comparecido en el Pleno de la Cámara, en nombre del presidente del Gobierno, Marcelino Iglesias, y a petición del PP, para informar sobre la opinión que le merece la situación de ejecución de infraestructuras hidráulicas en Aragón, así como sus planteamientos, propuestas y actuaciones destinadas a agilizar y acelerar su construcción. El consejero ha recordado que, "desgraciadamente", las competencias en la ejecución de obras hidráulicas no corresponden al Gobierno de Aragón sino al central, concretamente a la Confederación Hidrográfica del Ebro, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino. Ha insistido, con en anteriores ocasiones, en que si el Estado transfiriera a la Comunidad el dinero y la gestión de las obras, éstas tendrían un ritmo "mucho más ágil". Más preocupado que por la baja consignación presupuestaria en 2011 para las obras del Pacto del Agua, evidenciada en la tribuna por los miembros de la oposición, Alfredo Boné se ha mostrado preocupado por el nivel de ejecución presupuestaria en Aragón, que es "muy bajo". A pesar de todo, y a pesar de desear que el ritmo fuera más ágil, Boné ha explicado que la inversión certificada en toda su historia para el Pacto del Agua es ya del 47% de los 3.158 millones de euros del plan total, aunque hasta hace tres años sólo se había hecho efectiva un 36% de la inversión. El número de obras empezadas, no obstante, se mantiene constante, también la mitad del total. El problema, ha recalcado, sigue estando más en el propio modelo de gestión y ejecución, ha apuntado Boné, quien ha recordado que Aragón ya gestiona con éxito, con financiación procedente del Ministerio de Medio Ambiente gracias a un convenio que se firmó con la ex ministra Cristina Narbona, el Plan de Depuración y el Plan Pirineos. Conseguir impulsar esta vía es el principal empeño del consejero, quien ha aludido a las concesiones que en este sentido sí se han hecho por parte del Gobierno central a Cataluña o a Andalucía. El diputado popular Eloy Suárez ha preguntado a Boné por los motivos por los que se ha mostrado recientemente satisfecho con las dos últimas ministras de Medio Ambiente, Cristina Narbona y Elena Espinosa. El consejero ha recordado que la primera fue la artífice de la firma del convenio de Depuración, que trajo a Aragón 470 millones de euros de financiación del Ministerio, y la segunda metió a la Comunidad en los planes de desarrollo rural sostenible, también en los piloto, con otros 100 millones de euros. Aunque esto no tenga que ver con las infraestructuras hidráulicas, "con los otros ministros nunca saqué un duro", se ha lamentado Alfredo Boné. Suárez, por su parte, ha criticado las negativas del PSOE y el PAR para convocar la Comisión de Seguimiento del Pacto del Agua, foro en el que la ministra se vería obligada a dar cuenta del estado de tramitación de las obras. La realidad, ha insistido, es que en doce años de gobiernos socialistas en la Comunidad y ocho en el Estado, en Aragón no se ha almacenado ni un hectómetro cúbico más, y por eso el Partido Popular se siente "estafado" por el PSOE. En línea de las quejas por la escasa ejecución, y también inversión, se han pronunciado el portavoz de CHA, Bizén Fuster, y de IU, Adolfo Barrena. Fuster, aunque ha reconocido que la "culpa" no es de Boné, ha hecho hincapié en que por ejemplo, en el caso del recrecimiento de Yesa, el ritmo inversor no llega a un millón de euros al año, y que por tanto no importa que sólo se consignen dieciséis. Barrena, por su parte, ha dicho que el problema no es de encomienda de ejecución, sino de dinero, porque "no hay"