La vuelta del puente de la Virgen de agosto se saldó ayer sin incidentes destacables en las carreteras aragonesas. Según fuentes de Tráfico, aunque el tráfico fue abundante ni siquiera se registraron retenciones o complicaciones para la circulación. Al cierre de esta edición, el saldo del puente seguía estancado en los dos heridos graves del accidente de Viacamp y Litera, que ocurrió el sábado.

El suceso tuvo lugar al salirse de la N-230 un turismo ocupado por cinco personas. Tras chocar contra un árbol, el coche cayó por un terraplén y volcó en un barranco. A consecuencia de ello, dos de las ocupantes del vehículo resultaron heridas de gravedad, y fueron trasladadas al hospital Arnau de Vilanova de Lérida.

También el sábado se produjo otro accidente, esta vez en la ciudad de Zaragoza. D. H. D., de 26 años, perdió el control de su vehículo por causas desconocidas en la Z-40, a las 5.00 de la madrugada, y chocó con una farola, en el barrio de San José. Como consecuencia, el conductor --que dio negativo en la prueba de alcoholemia-- resultó herido leve y la ocupante del vehículo, S. M. R., de 27 años, corrió peor suerte y sufrió heridas de gravedad.

Aparte de estas dos incidencias, el tráfico en Aragón no causó problemas a los conductores en todo el fin de semana, ni siquiera ayer, con los abundantes desplazamientos producidos por la vuelta del puente de agosto. Y ello a pesar de existir algunos tramos complicados como la A-2, entre Calatayud y Zaragoza, el punto más conflictivo de la red de la comunidad. Con motivo de las obras que se realizan desde hace meses, el tráfico está siendo desviado a través de la la N-234 (Calatayud-Daroca), por la A-220 (La Almunia-Cariñena), o por la A-1101 (Épila-Muel) para acceder a la A-23 hasta Zaragoza.

Además, el tráfico de transportes especiales permanecerá restringido hasta la medianoche de hoy, lo que facilitó el tránsito de los turismos en este penúltimo gran desplazamiento estival.