La decisión de la DGA de delegar ciertas competencias a las Cámaras regionales de la comunidad supondría un alivio importante para la financiación futura de estos organismos. Tras la decisión del Gobierno central el pasado año de eliminar las cuotas que obligatoriamente pagaban las empresas a sus respectivas cámaras --y que se hace efectiva en el 2012--, su superviviencia a medio plazo estaba más que comprometida, ya que se trataba de su mayor fuente de ingresos (alrededor del 70%). En el caso de Aragón, entre los tres órganos recibían 5,3 millones. Por tanto, la Administración pasará a ser a partir del próximo año, mediante este tipo de fórmulas, el principal benefactor de las Cámaras. El presidente de la Cámara de Comercio de Teruel, Jesús Blasco, explicó que los organismos camerales están actualmente "en un periodo de transición" y que "es posible que haya que limitar el personal. Si asumimos nuevas competencias, a lo mejor no hay que hacer recortes de plantilla, pero si no lo hacemos tendremos que recortarlas".