Los pasajeros de las líneas 35 y 51 tuvieron el viernes por la tarde un espectáculo por el mismo precio del billete que sin duda hubieran preferido no presenciar. Un joven de 19 años se subió a la primera de estas líneas sin pagar, y al ser recriminado por el conductor comenzó a despotricar, empujando a algunos pasajeros y golpeando el vehículo. El conductor avisó entonces a la Policía Local, que invitó al joven a abandonar el transporte urbano.

Al poco rato, el alborotador subió en otro bus, esta vez de la línea 51, y repitió la operación, solo que esta vez se enfrentó a los agentes que acudieron a petición del conductor. Según fuentes policiales, se resistió con violencia a su detención, agarrándose a las barras de sujección del transporte.

Aunque no la tomó ni con el conductor ni con ninguno de los pasajeros, en mitad de la trifulca dañó parte del mobiliario, por lo que el conductor del vehículo interpuso la denuncia por la que los agentes procedieron a su detención y lo presentaron ante la autoridad judicial. El joven fue identificado como F. O. O.