El director general de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión (CARTV), Jesús López Cabeza, ha anunciado hoy en las Cortes de Aragón su intención de suprimir todos los patrocinios deportivos así como de eliminar el 25 por ciento de los puestos de libre designación y de los costes menos productivos.

También ha anunciado a los miembros de la Comisión Institucional y de Desarrollo Estatutario su intención de retrasar la puesta en marcha de las emisiones en Alta Definición, ya que, en su opinión, la actual crisis económica no hace aconsejable las inversiones de 7 millones de euros necesarias.

López Cabeza ha comparecido en las Cortes para explicar el modelo de radiotelevisión autonómica que el Gobierno de Aragón tiene previsto desarrollar durante la actual legislatura.

El nuevo director general de la CARTV ha elogiado la "excelente" situación en que se encuentra este medio autonómico, que conoce una parte importante de la ciudadanía y que, según él, registra un continuo incremento de espectadores.

En este sentido, ha informado de que Radio Aragón tiene 125.000 oyentes diarios mientras que la TV registra una cuota de pantalla del 10,2 por ciento lo que la sitúa entre la tercera y cuarta televisión autonómica más vista del país.

Ha reconocido el trabajo de los profesionales y ha agradecido el compromiso y aportación de ideas innovadoras. Sin embargo, ha observado un incremento notable de los puestos de libre designación y una "cronificación" del déficit de explotación, que ha pasado de los 18 millones de euros contabilizados a 31 de diciembre de 2010 a 19,3 según el último cierre contable a 31 de agosto pasado.

López Cabeza también ha alertado del importe de la deuda financiera, que asciende a cinco millones de euros más los tres que se van a formalizar para cerrar el año, de los cuatro meses que se tarda en pagar a los proveedores o de la existencia de gastos improductivos.

Entre los objetivos que el director general de la CARTV se ha marcado figuran alcanzar el déficit cero, para lo que pretende suprimir "absolutamente todos" los patrocinios deportivos, eliminar el 25 por ciento de los puestos de libre designación, revisar los suministros aprobados y paralizar el contrato de explotación y suministro con la intención de negociar una prórroga con la actual adjudicataria.

López Cabeza ha informado igualmente de que la CARTV se va a replantear las inversiones para emitir en Alta Definición, dado que el ritmo de crecimiento de este formato televisivo no va a permitir alcanzar su nivel óptimo en los próximos cinco años, aunque ha asegurado que se va tratar de garantizar los puestos de trabajo de este sector.

López Cabeza pretende además reforzar la imagen y utilidad de los medios públicos aragoneses, incidir en contenidos que vertebren la comunidad, aplicar una gestión eficiente de los recursos y limitar los techos de gasto.

Además, va a proponer un contrato programa que proporcione estabilidad a los medios y ponga en valor los compromisos por parte del ente, y desarrollar las posibilidades turísticas de la región a través de los contenidos.

Todos los grupos parlamentarios han respaldado la supresión de los patrocinios deportivos y la disminución de los cargos de libre designación y han elogiado el buen nivel de audiencia.

Sin embargo, el portavoz parlamentario de IU, Adolfo Barrena, ha acusado a la CARTV de incumplir la ley general audiovisual que exige que los informativos sean de elaboración propia y Nieves Ibeas (CHA) ha criticado la paralización de la programación por el retraso en los nombramientos.

El socialista Carlos Tomás ha abogado por la necesidad de que perdure la credibilidad de la Radio y Televisión pública aragonesa y ha recordado que la CARTV tiene mejor situación financiera que otros entes autonómicos y una de las mejores audiencias.

Alfredo Boné, del PAR, ha pedido que el objetivo del déficit cero no sea a costa de la pérdida de empleo y que la gestión no suponga eliminar lo que ha funcionado, mientras que el popular Ricardo Canals ha atribuido la situación de déficit a que no se han aplicado las medidas para reducir los gastos y a inversiones "innecesarias e improductivas".