La Asociación de Entidades Locales del Pirineo Aragonés (Adelpa) aprobó ayer por unanimidad su apoyo a las acciones que lleven a cabo los ayuntamientos del territorio que abarca Adelpa afectados por el proyecto de la línea de alta tensión Peñalba-Isona, al discurrir por término municipal de varios de ellos. Adelpa se suma también a las distintas alegaciones que puedan presentarse desde estos ayuntamientos.

"Varios ayuntamientos afectados han trasladado a Adelpa su preocupación ante un proyecto que, entre otros problemas, genera graves consecuencias medioambientales, condiciona el futuro del territorio por donde discurre y vulnera la normativa europea", señaló el presidente de la asociación, Pablo Castán.

Adelpa celebró ayer su primera comisión ejecutiva, después de que en octubre se eligiera a la nueva junta directiva. Uno de los primeros asuntos abordados por los nuevos gestores ha sido la llamada autopista eléctrica. "Adelpa no podía permanecer ajena a esta circunstancia y, acordamos, dentro de nuestros principios de trabajo, apoyar y respaldar a los ayuntamientos", remarcó Castán. Entre ellos están los de Olvena, Graus, Capella, Lascuarre, Monesma y Cajigar, Tolva y Puente de Montañana.

El proyecto presentado por Red Eléctrica Española (REESA) fue publicado en el BOE --en su fase de información pública-- en mayo, y aún permanece abierto el periodo de alegaciones. Mientras, la asociación ha solicitado reuniones con la Confederación Hidrográfica del Ebro y la DGA.